THE MISSING STOMPERS
Viajazz 2004
- Fecha: 7 de Julio de 2004.
- Lugar: Campo de Fútbol Municipal, Villalba (Madrid)
- Hora: 21:30 horas
- Asistencia: Lleno
- Componentes:
Arturo Cid (clarinete, voz)
Alejandro Pérez (saxo alto)
Fernando Berruezo (saxo tenor)
Pascual Piqueras (trompeta)
Chiaki Mawatari (tuba)
Marcelino Merino (banjo)
Carlos “Sir Charles” González (batería)
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Comentario:
Segunda edición del
festival de jazz de Villalba y jornada de puertas abiertas.
Miles de aficionados se dieron cita en el futbolístico
recinto que cobija este Viajazz, dispuestos a disfrutar y a
divertirse. Y vaya si lo hicieron.
Bajo una artística puesta de sol, justo a las nueve y media
de la noche aparecieron sobre el escenario los trajeados
miembros de The Missing Stompers, excelente banda de jazz de
Nueva Orleans que saben combinar como nadie el humor con la música,
y cuya formación está integrada por algunos de los mejores músicos
de este país. El redoble de caja inicial de Sir Charles González
descargó la secuencia de temas llenos de perfectos arreglos e
intensas ruedas de solos. Siempre fieles al estilo, no
resultaron monótonos en ningún momento. Las inteligentes y
bien dosificadas intervenciones humorísticas del clarinetista
Arturo Cid complementaron a la perfección las brillantes
intervenciones de los solistas. Alejandro Pérez estuvo
soberbio al alto, y Pascual Piqueras hizo gala del buen sonido
de trompeta a que ya nos tiene acostumbrados. Temas originales
se fundían en el repertorio con clásicos como On the Sunny
Side of the Street. Sir Charles y Marcelino Merino formaron
una sección rítmica rocosa y dinámica, completada por el
japonés Chiaki Mawatari a la tuba.
Mediado el concierto, tiempo para el espectáculo. El grupo
afrontó el blues que tan buen resultado les diera en el
programa didáctico de televisión El Conciertazo, y un
divertido Arturo Cid hizo cantar al público sobre diversas
partes del tema. Más adelante el clarinetista demostró sus
habilidades líricas cantando On a Slow Boat to China y Tiger
Rag, haciendo solos en scat y aportando aún más humor. En un
momento dado el grupo desaparece del escenario y Cid se queda
sólo haciendo scat a capella, para después imitar varios
instrumentos, siempre afinado y en tiempo.
El obligado final con una marcha de Nueva Orleans y el eterno
When the Saints Go Marching In, provocó una masiva afluencia
de público hacia las cercanías del escenario, y resultó un
excelente colofón de la actuación. Dada la naturaleza
gratuita de la misma, cabe esperar que el interés por el jazz
creciera esta noche en más de uno y más de dos de los
asistentes. Por The Missing Stompers, desde luego, no quedó.
Arturo Mora Rioja
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