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    BILL FRISELL BAND
24º FESTIVAL DE JAZZ SAN JUAN EVANGELISTA “A NUEVA ORLEÁNS, CON EL CORAZÓN”
  • Fecha: 13 de Noviembre de 2005
  • Hora: 19:30.
  • Lugar: C.M.U. San Juan Evangelista, Madrid.
  • Aforo: Completo
  • Componentes:
    Bill Frisell, guitarras acústica y eléctrica;
    Jerry Scheinman, violín;
    Grez Leigz, pedal steal guitar, guitarra acústica.

    Jerry Scheinman
    Bill Frisell
    Greg Leigz
  • Comentario: Una vez más hay que felicitar a la dirección del “Johnny” por su dedicación desinteresada,y por su compromiso en pos de traer músicos por encima de nombres, aunque en este caso confluyen sendas facetas. Nadie puede a estas alturas dudar del músico y guitarrista que supone Bill Frisell

    La verdad es que antes, en los prolegómenos del concierto,-en la calle-ya se respiraba habiente de gran concierto; en las colas comentarios de aficionados, que 30 minutos antes formaban una “serpiente multicolor”que llenaba el pasillo, y que posteriormente llenó la sala.

    Bill se presentó en Madrid con el mismo trío con el que inició la gira el 1 de noviembre en Praga, y que finalizará el 14 del mismo mes en Oporto y, habiendo actuado en Alemania, Noruega, Italia y Rótterdam. En el 2006 iniciará una gira con formación y estilo sensiblemente distinto-Ron Miles, Ton Scherr, Greg Tardy y Kenny Wollesen-.

    Y comenzó el concierto con los diez minutos de cortesía para acomodar a todos. Empezó como si no lo hubiera hecho, como si tal cosa, de forma indolente, casi imperceptible, sereno y bello. Creo reconocer la melodía de un tema de Neil Young, cuyo título no recuerdo.

    La propuesta, de la cual no existe disco alguno-al menos que yo tenga conocimiento-se basó en interpretar temas que van como digo desde N.Young hasta Led Zeppelin y, mayoritariamente los Beatles.

    Temas que inventan el folk, el country y el pop; tocados con la finura y la maestría que siempre ha hecho gala un artista de la enjundia del que nos ocupa. Sonido suave, amable, sencillez atmosférica, confiriéndole un aspecto conceptual al concierto en el que cada canción parecía formar parte de un único tema.

    No se puede negar el esfuerzo por buscar nuevos caminos dentro de la música por parte de este trío, si bien es cierto bastante alejado del jazz,- a mi parecer- y alcanzando un sonido naif y divertido por momentos que hizo las delicias de la abarrotada sala y, de los propios músicos con sonrisas y, miradas “endorfinas” de complicidad, que mas que entendimiento musical parecía una declaración de intenciones sentimentales, sobre todo entre la violinista J.Scheinman y B.Frisell.

    Y ya que hablamos de Jerry Scheiman,- violinista de fino estilo folclórico y técnica clásica-salió al escenario con un look de sexualidad ambigua .Sobre su cabeza una corona de flores que le daba un aspecto a lo Venus de Botticelli, que fue perdiendo a medida que el concierto transcurría.

    Grez Leigz, se encargó de ser el sostén de ambos, llenando espacios y creando atmósferas de reminiscencias country con su pedal steal guitar. Música de cámara para oídos atentos y respetuosos, que hizo las delicias de un público entregado a la causa, aplausos y vítores que “obligaron” a un nuevo tema extra, suponiendo un particular homenaje a los Beatles ó quien sabe si a Johnn Lenon como apuntaba una buena amiga del Club, por los 25 años de su fallecimiento.

    Sea como fuere la cosa no dio para más, y todos los asistentes marcharon con satisfacción, y alegría a sus domicilios con una buena carga de sentimientos de poder haber presenciado a uno de sus ídolos.