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CARLOS EMA TRIO
Nuevos valores

  • Fecha: 11 de Abril de 2006.
  • Lugar: El Berlín Jazz Café (Madrid)
  • Componentes:
    Carlos Ema - piano
    Francisco López "Loque" - contrabajo
    Federico Marini - batería
  • Comentario: Una de las apuestas del nuevo Berlín es la promoción de músicos jóvenes en su sesión de los martes. Bajo el epígrafe de "Nuevos valores" las tablas del remozado club madrileño verán pasar interesantes promesas del jazz como la que actúo anoche: el pianista Carlos Ema y su trío.

    Y qué mejor carta de presentación para un jazzman novel que demostrar un buen conocimiento de los pilares teóricos del jazz. Ema ofreció un discurso clásico, de ejecución impecable, con un vocabulario claro repartido entre todos los subestilos que han conformado las corrientes centrales del jazz. La revisión de clásicos standards americanos nos sumergió alternativamente en el terreno del swing, el cool, el bop e incluso en territorios más modernos, con la figura de McCoy Tyner paseándose por el escenario.

    "Bye Bye Blackbird", "Ah Leu Cha" o la balada "I Fall in Love Too Easily" fueron algunos de los temas que conformaron el primer pase. El trío caminaba con solvencia, gracias al swing y la rocosidad del contrabajista Francisco López y al buen hacer rítmico de un Federico Marini que, apoyándose habitualmente en su timbal aéreo, arrancó aplausos del respetable en sus intervenciones solistas. Carlos Ema, por su parte, mostraba un buen uso de su mano izquierda y un torrente de ideas claramente ligadas a la tradición jazzística. El "Contemplation" del mencionado Tyner cerró el primer pase aportando variedad y un cierto halo místico.

    Unos minutos de descanso y el trío volvió a la carga con el blues relajado de "Freddie Freeloader" y una bonita interpretación de "There Is No Greater Love". Ema seguía improvisando con desparpajo, recurriendo a viejos clichés que siempre funcionan cuando se saben usar con mesura. El momento difícil de la noche vino con el "Line for Lyons" de Gerry Mulligan, donde la inusual métrica de 7x4 generó sensaciones distintas a las vividas durante todo el repertorio anterior. Un blues para desengrasar y el final con "Tenderly", delicioso standard que ponía el broche a un concierto correcto y aseado, fruto de un buen trabajo y que nos recuerda la existencia de una cantera local a tener en cuenta.

    © 2006