Comentario: La Casa Encendida
se afianza día a día como escenario alternativo.
Su programación diversa y arriesgada atrae a un público
inquieto cuya fidelidad a la sala garantiza una entrada mínima.
En este caso, además, el aforo se vio completado por
aficionados al jazz dispuestos a disfrutar del saxofonista Ken
Vandermark sin sus Vandermark 5 y del batería de Atomic,
Paal Nilssen-Love, sin su grupo habitual.
De acuerdo con la idea del festival, ambos músicos
enfocaron la actuación desde la libre improvisación,
buscando la continua interacción y sugiriendo entornos
formales sin hacerlo de modo explícito. Nilssen-Love
(con los botones de su camisa abrochados y desabrochados de
forma alterna) basaba su discurso en polirritmos o bien ejecutaba
obsesivamente patrones descubiertos sobre la marcha. Vandermark
combinaba la libertad de los cromatismos con la navegación
por armonías más o menos claras, peregrinando
incluso por tierras modales; recursos todos ellos que dotaban
a su interpretación de significado. El segundo tema
fue menos jazzístico y más abstracto. Nilssen-Love
jugaba con diversos enseres percusivos (cadenas, bloques de
madera, el arco de un contrabajo, platos splash que
colocaba sobre la caja y el tambor base,…) mientras
su compañero de andanzas, en este caso en función
de acompañante, reproducía infinitas frases
circulares. Resultaba increíble cómo en un aparente
caos sonoro ambos músicos podían encontrar puntos
de apoyo comunes donde ejecutar unísonos y silencios
de idéntica duración.
¿Era el acople de una guitarra eléctrica con
distorsión? No, se trataba del clarinete de Ken Vandermark
atacando una nota aguda con una precisión envidiable.
El de Chicago, con su pierna derecha adelantada y en continuo
movimiento, inventaba frases de marcado acento rítmico,
algo común a la tercera pieza interpretada por el dúo.
Un corto y merecido bis alargó el concierto hasta casi
la hora de duración, bajo los aplausos de un público
que digirió la actuación entre la sorpresa y
la admiración. Tras la tormenta sonora, llegó
el reposo con la venta y firma de CDs por parte de ambos músicos.