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..: BAPTISTE TROTIGNON: EL PIANISTA DESCONOCIDO

   
 


En el presente año 2005, uno de los músicos más prometedores del panorama musical francés, el pianista Baptiste Trotignon, acaba de publicar su cuarto trabajo como líder, se trata del disco “Trotignon, El-Malek, Hall, Pallemaerts” (Naïve NV 803011).


© Foto Thomas Dorn


   

Más de un aficionado se preguntará, ¿quien es este músico?, ¿de donde ha salido?, ¿qué música desarrolla? o ¿con quién toca o ha tocado?. El simple nombre de Baptiste Trotignon deja indiferente a la mayoría de los aficionados, y algo similar sucede con las grandes guías musicales de referencia, como la americana All Music Guide o la europea The Penguin Guide to Jazz, que no lo citan; pero el desconocimiento de este excelente artista no es suficiente excusa, para poder dar a conocer uno de los músicos franceses con mayor proyección, y que cuenta en su haber con importantes premios, así como el reconocimiento de algunos de los intérpretes más reputados de Francia.

De entrada hay que señalar algunos datos biográficos, para poder conocer el desarrollo de este músico. Baptiste Trotignon nació en el año 1974 y a la edad de cinco años sus padres le iniciaron en la carrera musical con el violín. Pero durante su infancia, Trotignon se impregnó de la sonoridad del piano, ya que su padre lo tocaba como hobby. Ello propició que empezase a estudiar piano por su propia cuenta a la edad de nueve años, (concretamente el repertorio clásico y romántico alemán). Su insistencia con el instrumento le permitirá unos años más tarde, poder graduarse en la categoría de piano y composición en la Academia de Música de Nantes. A la edad de 13 ó 14 años, Trotignon empieza a considerar la música de una forma más seria, y se le presentan dudas entre dedicarse a la música clásica o al jazz.

En el año 1995, se traslada a Paris, en donde empieza a ser conocido en los clubes de jazz, así como en Festivales internacionales. Su presencia en la capital francesa le concede la posibilidad no sólo de darse a conocer como músico, sino de realizar muchos contactos a nivel musical, que le van a proporcionar importantes réditos en un futuro no muy lejano, y que le permitirán trabajar como acompañante de músicos de la talla de Eric Le Lann, Christian Escoudé, Ricardo Del Fra, Claudia Solal, François y Louis Moutin, (con quienes entablará una fructífera relación profesional en su grupo y participará en grabaciones discográficas), Archie Shepp, David Murray, Aldo Romano, o Frank Morgan, por citar sólo unos cuantos ejemplos.

En 1996, obtiene el segundo premio como solista en el Concurso Nacional de Jazz de la Defensa. Desde el año 1998 ha ido desarrollando sus ideas musicales como líder de su propio trío, formado por Clovis Nicolas (contrabajo) y Tony Rabeson (batería). En el año 2001 recibe el premio Django de Oro, como el músico francés más prometedor por su primer álbum “Fluide”. Su segundo trabajo como líder “Sightseeing” apareció a finales del año 2001, y con el mismo, Trotignon empieza a confirmar su madurez musical. En el año 2002 recibe uno de los premios más importantes de su carrera musical, gana el Gran Premio en el Internacional Piano Jazz Martial Solal 2002. Este concurso constó en el año 2002, de más de 100 candidatos de 29 países, compitiendo unos contra otros. El jurado estuvo compuesto por nueve figuras del mundo del jazz escogidas por el propio Martial Solal. Unos meses más tarde, en el año 2003 recibe el premio como músico revelación francés, en el Premio Jazz Victory. En la primavera de ese año aparece su tercer trabajo, y su primero a piano sólo, denominado “Solo”, en donde interpreta música completamente original, hasta el presente año 2005, en donde pública su último cedé, con una rítmica completamente distinta hasta la fecha.


© Foto Thomas Dorn

Producción musical
Como ya he comentado con anterioridad, su discografía como líder no es abundante, tan sólo cuatro trabajos desde el primero publicado en el año 2000 hasta la actualidad, y todos ellos publicados en el sello discográfico francés Naïve. Así mismo, ha participado en gran cantidad de grabaciones como acompañante, resaltando entre ellas las llevadas a cabo con el Moutin Reunion Quartet, con el Jean-Luc Chevalier Quartet o con Claudia Solal.

Su primera grabación como líder y en trío se llamada “Fluide” (Naïve Y 225 099).


Grabado en el año 1999, pero publicado en el año 2000, y se trata de un trabajo que combina tanto composiciones propias como standards. En esta grabación se nos presenta como un músico con un extraordinario talento y con una gran musicalidad, lo que le valió que el propio Martial Solal declarara a cerca de él, como el músico más brillante de la nueva generación de músicos que habían surgido en Francia a principios de siglo. Para llevar a cabo este proyecto se rodeó de los músicos que en esa época tocaban con el, y que eran los franceses, Clovis Nicolas (contrabajo) y Tony Rabeson (batería). De la escucha de la grabación, se puede percibir un trabajo muy personal y que le ha servido a Trotignon, para dar a conocer su mundo musical, lleno de influencias y vivencias personales. Se puede apreciar a un músico que conoce a la perfección la tradición del piano, desde Bud Powell a Bill Evans, llegando a músicos actuales como Brad Mehldau. En Trotignon podemos ver en diversos pasajes musicales una de las etiquetas más distintivas de la influencia Mehldau, y en concreto, el tratamiento musical de independencia de ambas manos. La interpretación de los standards es sencillamente delicioso, atreviéndose con temas de gran calado musical como “This is new”, “My shining hour” o “I´m fool to want you”. El resultado de toda la grabación nos confiere una música muy “fluida”, con dosis de swing y con interesantes ideas a nivel harmónico.

Tras el éxito de su primera grabación y los consecuentes frutos que le reportó, tanto a nivel de reconocimiento como músico, como de premios, Trotignon no tarda de nuevo en grabar y en publicar nuevo álbum. Es por ello que en el año 2001, aparece su segundo trabajo, también a trío (y con los mismos músicos Clovis Nicolas y Tony Rabeson), “Sightseeing” (Naïve Y 226 182).

En este segundo trabajo nos encontramos con un músico extraordinariamente maduro en donde nos aporta una evolución significativa de su trío en diversos aspectos. De entrada todos los integrantes del trío aportan temas propios al trabajo, lo que permite una mayor interacción entre ellos, pero a su vez nos encontramos con formas musicales diversas, con una música muy abierta lo que permite la posibilidad de obtener gran cantidad de paletas sonoras por parte de todos los integrantes.

Otra de las cualidades de este “nuevo” trío proviene, tal y como señala el propio Trotignon en las notas que acompañan al cedé, de su forma de concebir la música de trío (piano, contrabajo y batería). Y en concreto, de la búsqueda del “sonido” como parte esencial y primaria de grupo, y en donde cada instrumentista aporta su personalidad en aras de una musicalidad mucho más importante, y que es la sonoridad del grupo, todo ello con la intención de buscar una cohesión y afinidad, que se percibe a la perfección a lo largo de los temas interpretados. Las composiciones que se encuentran en este trabajo, permiten observar una música muy “trabajada” y en consecuencia muy arreglada, pero que tienen como leit-motive el ser respetuosos con la melodía. El último aspecto de esta grabación, es que encontramos a un pianista muy preocupado por los aspectos harmónicos, lo que proporciona una riqueza musical por parte de todos los integrantes, y que permite una escucha rica en matices y paletas sonoras y en especial con un piano complicado en los desarrollos, muy melodioso, lírico, pero con una gran personalidad en el desarrollo de la música. En resumen, un trabajo en donde la compenetración del trío llega a cotas de perfección y con una música para disfrutar en toda su extensión.

Tras los primeros discos en formato de trío hay que esperar dos años para que aparezca su nuevo trabajo, en esta ocasión su primer disco en solitario “Solo” (Naïve Y 226 210).

Con este nuevo disco, Trotignon se presenta ante uno de los retos más exigentes que existen para un pianista, y este no es otro, que el de desarrollar un programa musical sin la colaboración de otro músico. Este trabajo consiguió las mejores críticas en Francia cuando apareció en el mercado discográfico, y por desgracia para los aficionados españoles, pasó totalmente inadvertido en nuestro país. El cedé se encuentra conformado por once temas (algunos con una duración inferior a los tres minutos), y todo el material desarrollado es original de pianista. Señalar para los coleccionistas, que en Francia existe la posibilidad de encontrar una edición limitada de este disco, con tres temas adicionales que no salieron en la primera edición de esta grabación.

Este trabajo es un de los proyectos más ambiciosos del pianista francés, en donde todo es importante, desde la portada del disco (donde aparece la foto de sus manos en primer plano y en reposo), pasando por la maquetación sobria de todo el disco y por supuesto, la música interpretada. La escucha atenta del disco proporciona una idea de continuidad y de totalidad musical en su planteamiento, estando los temas unificados en un grupo de cuatro, en uno de tres y otro de cuatro, a modo de suite. Baptiste Trotignon se muestra como un pianista complicado en su concepción musical, con un toque en ocasiones confidencial y con un aire melancólico en otros. Sus desarrollos en la mayoría de las ocasiones son de gran dinamismo, muy cerebrales pero muy limpios en su ejecución.

En el desarrollo de los temas podemos encontrar claras influencias de estilos como la música clásica, el blues y ciertas paletas sonoras con reminiscencias a música new age. La utilización de la independencia de ambas manos es apreciable, así como la obsesión por la repetición de motivos con una mano, mientras que con la otra teje líneas de improvisación o líneas de acordes. Además, Trotignon es capaz de desarrollar un swing persistente y contundente, para pasar a otros pasajes sonoros de intensidad y calidad. Este trabajo en solitario de Baptiste Trotignon hay que escucharlo con detenimiento y repetidas veces, para poder extraer del mismo el caudal de musicalidad que contiene.

Por último, y para acabar con la discografía de Baptiste Trotignon, en el presente año 2005 se presenta el último disco del pianista francés “Trotignon, El-Malek, Hall, Pallemaerts” (Naïve NV 803011).

El último disco de este pianista francés representa un nuevo reto en su carrera, debido a que se ha rodeado de un cuarteto de interpretes (su anterior formación de grupo era el trío), y de la utilización de unos componentes completamente diferentes de los que hasta ahora había utilizado en un estudio de grabación. Pero una de las cuestiones más importantes de este trabajo, es la participación de otro estupendo (y valga el decirlo de nuevo) y desconocido músico francés, el saxofonista David El-Malek. Su aportación es similar a la del pianista, al firmar cinco temas originales para la grabación.

El encuentro entre pianista y saxofonista es del todo productivo a nivel musical, y su entendimiento es palpable a lo largo de los temas que se desarrollan, quedándose en una posición expectante la sección rítmica, y que se encuentran dispuestos a seguir a ambos líderes a lo largo de los planteamientos que les van diseñando, tanto en los respectivos solos que despliegan, como de acompañamiento como grupo.

La música desarrollada tanto por Trotignon como El-Malek, es ante todo momento exigente, lo que conlleva que cada uno por igual se encuentre bien al tanto de los retos musicales que plantea, en algunos momentos convirtiéndose en una esplendida demostración de técnica instrumental, rica y de gran invención rítmica por parte del saxofonista, y de gran sutileza y fluidez sonora por parte del pianista. El claro ejemplo de esta afirmación se puede observar en el tema compuesto por El-Malek “Le chemin du serp”, o el de Trotignon “Snow”. El resultado final de la grabación es un grupo prometedor y que presenta unas credenciales perfectas para tener continuidad en futuras grabaciones.

Todos los trabajos comentados vienen a demostrar de una forma clara, la gran calidad que atesora Baptiste Trotignon, gracias a una enorme aptitud tanto como músico como compositor, y que el aficionado español hará bien en descubrir, y por ello en tratar de buscar estas grabaciones que harán las delicias de cualquier aficionado al piano, y que a buen seguro se quedará sorprendido.

P.D. Quisiera agradecer las facilidades que ha ofrecido el sello Naïve en España, tanto por el material gráfico, documental y sonoro facilitado para poder abordar la redacción del presente artículo.

© Juan Carlos Abelenda, Tomajazz 2005