VARIOS
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Título: Carnegie Hall Salutes the Jazz Masters
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Año: Grabado en directo en el Carnegie Hall de Nueva York, 6 de Abril de 1994.
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Componentes: Don Alias (percusión), Tom Barney (bajo eléctrico), Ray Brown (contrabajo), Kenny Burrell (guitarra eléctrica), Betty Carter (voz), Dee Dee Bridgewater (voz), Peter Delano (piano), Al Foster (batería), Charlie Haden (contrabajo), Omar Hakim (batería), Herbie Hancock (piano), Roy Hargrove (trompeta), Joe Henderson (saxo tenor), Bruce Hornsby (piano), Antonio Carlos Jobim (piano y voz), J.J.Johnson (trombón), Hank Jones (piano), Abbey Lincoln (voz), Jeff Lorber (teclados), Christian McBride (contrabajo), John McLaughlin (guitarra eléctrica), Jackie McLean (saxo alto), Pat Metheny (guitarras eléctrica y acústica), Art Porter (saxo alto), Renee Rosnes (piano), Stephen Scott (piano), Jimmy Smith (órgano), Gary Thomas (saxo tenor), Steve Turre (trombón y conchas), Kenny Washington (batería), Vanessa Williams (voz), Yosuke Yamasita (piano) y la Carnegie Hall Jazz Band dirigida por Don Sickler.
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Composiciones: Tea for Two (V.Youmans & I.Caesar); Willow Weep For Me (Ann Ronnell); Shiny Stockings (F.Foster & E.Fitzgerald); Just One of Those Things (Cole Porter); Parisian Thoroughfare (Bud Powell); Manteca (D.Gillespie, C.Pozo & G.Fuller); Turn Out the Stars (Bill Evans); Walk On the Wildside (Bernstein & David); Down By the Riverside (tradicional); Yellowstone (J.Lorber & J.Pfeifer); It’s About That Time (Miles Davis); Call It ’94 (Herbie Hancock); The Girl From Ipanema (A.C. Jobim); How Insensitive (A.C.Jobim, V.D.Moraes & N.Gimbel); Desafinado (A.C.Jobim, N.Mendonça & G.Kees); The Eternal Triangle (Sonny Stitt); I Must Have That Man (J.McHugh & D.Fields); How High the Moon (N.Hamilton & W.Lewis); Tangerine (V.Schertzinger & J.Mercer); Now’s the Time (Charlie Parker)
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Comentario: Diez años hace ya del concierto 50 aniversario de Verve records que recoge este vídeo. Diez años de esa reunión de leyendas, grandes de su época y alguna que otra promesa, con suerte desigual pero conformando, en todo caso, un plato de apetecible disfrute. La gala, cuyos presentadores fueron Herbie Hancock y Vannessa Williams, contó con la revisión de míticas interpretaciones como homenaje a alguno de los grandes (Miles Davis, Dizzy Gillespie, Charlie Parker, Bud Powell, Art Tatum, Billie Holiday, los conciertos de Jazz at the Philharmonic, ...), y formaciones nunca vistas hasta entonces, algunas de ellas arropadas por la Big Band del Carnegie Hall bajo la dirección de Don Sickler.
La velada dejó detalles de lujo de las cantantes (la ya malograda Betty Carter, Abbey Lincoln, Dee Dee Bridgewater y Vannessa Williams), una especie de puesta de largo de jóvenes talentos (Roy Hargrove, Peter Delano, Christian McBride) y estrellas foráneas (encendida interpretación la del pianista japonés Yosuke Yamasita), así como algunas de las últimas actuaciones en directo de maestros como J.J.Johnson, Joe Henderson o Antonio Carlos Jobim quien, al piano y voz, recreó un inolvidable How Insensitive a dúo con la emotiva guitarra acústica de Pat Metheny.
Mediado el espectáculo hubo cabida para música de tintes más contemporáneos, con el dúo Hancock-McLaughlin reviviendo el espíritu de los dúos Bill Evans-Jim Hall, un recuerdo a los grooves setenteros de Miles Davis y un guiño a la Fusión de los 80, con músicos menos estrictamente jazzísticos como Jeff Lorber o Bruce Hornsby. A pesar de la buena intención esta fue quizás la parte más floja del concierto.
Como puntos álgidos tenemos el Down by the Riverside con Jimmy Smith y Kenny Burrell, el número de piano solo de Hank Jones, la rendición de Manteca con Roy Hargrove y el original uso de las conchas por parte del trombonista Steve Turre, el The Eternal Triangle en plan jam session con Jackie McLean, Roy Hargrove, Pat Metheny y Stephen Scott y la verdadera jam session, la final: un parkeriano Now's the Time que comienza con un dúo de contrabajos entre maestros de lejanísimas generaciones: Ray Brown y Christian McBride. Todo ello con ambiente solemne y traje de gala para todos los músicos.
Si bien la grabación no aporta nada nuevo, y a pesar de los ya comentados altibajos, este vídeo (del que también se editó una versión reducida en CD) constituye una pieza histórica y de enorme calidad, recomendable para aficionados al jazz de cualquier nivel.
Arturo Mora Rioja