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8 de Mayo de 2003Steve Coleman presentó a la última encarnación de su grupo más duradero en el tiempo, "The Five Elements", activo desde mediados de los años 80. En esta nueva formación, a su saxo alto le acompañaban trompeta y armónica, más la base rítmica de bajo eléctrico, batería y percusiones.
El concierto en la Casa de Cultura de Egia (con su fantástica sonoridad) empezó con un cuarto de hora de retraso y se prolongó durante dos largas horas. Largas por que a pesar de la gran calidad de todos los músicos (especialmente Steve Coleman y el armonicista Grégoire Maret quien tras el primer solo del jefe, con apenas respuesta por parte del público, logró con el suyo los aplausos más entusiastas) su titular no mostró nada que no hubiera mostrado ya en sus múltiples grabaciones, a lo que se unió la falta de interacción entre los músicos. Esta no existió prácticamente, siendo uno de los momentos más interesantes del concierto las tres rondas de breves solos que al final del concierto acometieron los tres sopladores. Es reseñable que por parte de la base rítmica pareciera que su casi único objetivo era marcar un ritmo obsesivo, milimétrico sobre la música de Coleman y lejano en su mayoría de toda sutileza, a pesar del bonito detalle que tuvo el conguero con la interpretación de unas melodías con su instrumento. Todo esto se tradujo en un plano concierto dónde prácticamente todo era previsible y unas partes terminaban recordando a otras anteriores.
Musicalmente recorrimos una parte de la herencia musical afro-americana: el jazz clásico (en forma de tremenda balada tras la suite inicial de 40 minutos con sus cambiantes ritmos) incluyendo aromas a blues y a be-bop; también la música afro-cubana y por supuesto los ritmos funkies e incluso el free (apareciendo en ciertos momentos puntuales en forma de disonancias). En cuanto a la bailarina señalar que tras un energético inicio en dónde integró su tarea perfectamente con la música del grupo, terminó siendo una invitada de lujo en primera fila, salvo en muy esporádicos momentos.