OREGON
III Muestra Internacional de jazz de Madrid "emociona
!!! JAZZ" 2003
- Fecha: 30 de octubre 2003
- Lugar: Conde Duque
- Hora: 21:30 h.
- Asistencia: dos tercios del aforo
- Componentes:
Ralph Towner (guitarra, piano, teclados)
Paul McCandless (oboe, saxo soprano)
Glen Moore (contrabajo)
Mark Walker (batería, percusión)
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Comentario:Una vez más disfrutó
la noche madrileña de la belleza atemporal del repertorio
de los míticos Oregon, formación que nació
al enraizar esta rama desprendida del Paul Winter Consort,
allá por el año ‘70. La última
ocasión para paladear sus delicias en esta ciudad fue
en el San Juan Evangelista en Noviembre del 2000; en este
caso, tres años después, lujoso concierto inaugural
del III Ciclo Emociona!!!Jazz.
Towner y compañía siguen creando en cada una
de sus actuaciones atmósferas inigualables, con delicados
equilibrios entre lo escrito y lo improvisado, el jazz y las
músicas de diferentes culturas, con un estilo propio
e inconfundible lleno de matices. En este caso interpretaron
un repertorio variado de su extensa discografía, incluyendo
un gratificante tema libre improvisado y una pieza de forma
libre escrita por Towner incluída en el delicado doble
CD del grupo con la Tchaikovsky Symphony Orchestra “Oregon
in Moscow” que salió a la luz en el 2000 al que
ha seguido un directo en Yoshi’s en 2002 (producidos
estos últimos por Steve Rodby) y una reedición
este año del directo “In performance” con
Collin Walcott de 1980.
El grupo se encontró realmente como pez en el agua
sobre el escenario del Conde Duque, con excelente sonido tanto
dentro (en palabras de McCandless) como fuera del mismo. Aun
tras más de treinta años de trabajo en común,
siguen abundando en directo las miradas de complicidad entre
el cuarteto, con un Towner tranquilo y sobrio haciendo las
labores de dirección encubierta y Moore desbordante
y desinhibido, bailando sin parar con su contrabajo; Mark
Walker ejerce más de baterista que de percusionista,
al contrario que sus predecesores, el fallecido Collin Walcott
y el hindú Trilok Gurtu, a los que en ocasiones se
echa de menos, sin desmerecer su trabajo en la formación;
todo ello ensambla un sólido andamio para que Paul
McCandless edifique solos y líneas melódicas
con la delicadeza y elegancia que le caracteriza, tanto al
soprano como con los instrumentos de lengüeta.
Una vez más, una visita gratificante e inolvidable
de cuatro músicos que desprenden excelentes vibraciones,
tanto en el plano musical como en el personal y han escrito
con rotundidad una página de lectura obligada en la
historia del jazz y la música improvisada.
Sergio
Cabanillas González
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