Comentario: La primera parte del concierto ha finalizado, hay una pausa de 15 minutos, el público puede volver a hablar y fumar en la oscuridad de esta cálida noche de octubre.
Keith Tippet camina sobre el escenario. A Paul Rogers lo he escuchado otras veces tocando con otras formaciones. Lo que me choca de él es su graciosa cara y sus poderosas manos y dedos. Me recuerda a un Elfo proveniente de un bosque antiguo. Tony Levin no es joven pero lleva una larga melena de pelo blanco y Paul Dunmall es el gigante del grupo. Los cuatro parecen relajados.
Mujician ¿que significa? No sé, no preguntaré. Supongo que tendrá que ver con sensaciones musicales. Músicos, magos, bardos medievales o gitanos herrando de ciudad en ciudad a contar cuentos de música y atmósfera mágica.
El concierto fue fascinante. Cuatro largas canciones o movimientos que incluían desde algunos solos hasta orgánicas improvisaciones colectivas.
Keith Tippet subiendo las escaleras negras-y-blancas del piano - cada vez más rápido a la par del ritmo del contrabajo, tras ello jugando con objetos escondidos sobre las cuerdas, consiguiendo sonidos de clavicordio.
El público estaba hipnotizado por los cuatro músicos derivando suavemente desde las más duras improvisaciones hasta los sonidos más delicados. Todo el mundo estaba cautivado por el ritmo. Tony Levin vivamente acariciando los timbales. Paul Rogers perdido en un solo. Sus manos luchando con las cuerdas del contrabajo, sus dedos golpeando, acariciando, frotando el contrabajo, como si fuese una mujer... llorando y gimiendo... sus ojos... perdidos en alguna parte del ritmo. Por último y no por ello menos importante Paul Dunmall, con su saxo intercalándose con los otros instrumentos con su potente, dulce y dura voz.
Fué una actuación completamente distendida sin problemas ni interrupciones. Los cuatro músicos disfrutaron y dejaron en el aire la energía del público.
Mujician - Simplemente música mágica.
Stefania Errore.
