Lugar: Fundación Miró (Festival "Nits de Mùsica")
Fecha: 25 de julio de 2002. Hora Prevista: 20:30
Aforo: Unas 150 personas. Entrada: Unas 80 personas
Músicos
Comentario:
Presentado por Agustí Fernandez, organizador del festival Nits de Mùsica y célebre pianista de Jazz de Vanguardia, el concierto empezó unos 20 minutos después de la hora anunciada, excusable debido a que coincidía con la multitudinaria celebración del 10º aniversario de las olimpiadas en Barcelona y dado que la sala de conciertos estaba cercana al estadio olímpico. Aparte presentar a los músicos, comentó la sustitución del batería Hamid Drake por Sunny Murray posiblemente debido a cambios en las agendas.
Durante una hora y cuarto, sin interrupciones ni bis, los músicos ofrecieron al público lo mejor de sus cualidades artísticas, en un espectáculo disfrutable por cualquier experimentado oyente del free jazz.
Como un homenaje a Albert Ayler, implícitamente se respiraba devoción, respeto y admiración por uno de los padres del Free, a veces, denotable en escena por las maneras interpretativas similares a las del desaparecido. La música, también llevaba en ocasiones a la escena de la libre improvisación europea (Evan Parker, ICP Orchestra, Han Bennink, Peter Brötzman) y al free en estado puro de Ornette Coleman, Jimmy Lions, Marion Brown, Frank Wright, etc...
Generalmente, los temas empezaban con unas suaves
notas y tempos bajos como descubriendo el espacio sonoro que iban ocupando. A
medida que el tema avanzaba en el tiempo, también lo hacía en la complejidad
musical, ritmo, o resumido en una palabra: intensidad, llegando a generar
momentos de trance como libre manifestación de arte puramente creativo dentro
del cual parecian flotar los músicos.
Plenamente concentrado en su labor de baterista, Sunny Murray encajaba cada nota
con maestría y con todo el peso de sus lustros de experiencia y como cofundador
del primer free. El calor, hacía mella en su epidermis dejándolo empapado a
los pocos minutos del inicio del concierto, aunque parecía que su genio le hacía
ir más allá de este hecho circunstancial, llegando a veces a caerle la baba en
medio de su estado de trance. Baquetas normales se alternaban con las escobillas
y los algodones. El hecho de que se le cayera, en una ocasión, la baqueta no
significó ningún percance en la sensación del tema. Las notas graves de sus
timbales, tapaban, a veces, a las procedentes del bajo aunque ello no
representaba ningún contratiempo.
Peter Kowald exprimía las capacidades acústicas de su contrabajo tanto en la manera de tocarlo como en las notas que obtenía: Tensionar y destensionar las cuerdas mientras tocaba, juntar con los dedos dos cuerdas y mover la mano hacia el centro del bajo, rascar las cuerdas verticalmente con el arco, percusionar éste con la parte inferior de las cuerdas para obtener un sonido breve y agudo, etc... aparte de esto, obviamente también utilizada el instrumento como más se lo conoce cumpliendo excelentemente su cometido.
Assif Tsahar, el lider de la banda, pletórico de
falcultades, transmitía con destreza y habilidad su mensaje musical mediante su
Saxo Tenor. Comenzando relajado e incrementando paulatinamente su ritmo y
fiereza. Con abundantes armónicos y agudos sostenidos. A veces, se le marcaban
las venas del cuello como reacción física a su entregada interpretación.
Nunca asomó una sombra de duda o desorientación. Incluso con el clarinete bajo
se desenvolvía con soltura en formas y contenido. Con 33 años, la mitad de
Sunny Murray, me da la impresión que está en una ola ascendente de calidad y
ha elegido lo más lejano a las preferencias del gran público como referencia
en la que moverse, o sea el free jazz. Como heredero de tal, sabe beber de esas
fuentes como para rejuvenecerlo y llevarlo más allá como punta de lanza de la
vanguardia jazzística. Para muestra un botón: podemos disfrutar con su formación
y disco "Open Systems" junto con Hamid Drake, Hugh Ragin y Peter
Kowald.
En resumen, fué un buen concierto (no para cualquier público) de aquellos para guardar en un espacio reservado en la memoria.