Comentario: Un año
más la Fundació Joan Miró de Barcelona
ha llevado a cabo su ciclo de conciertos de verano. La presente
edición, la número doce, ha presentado un planteamiento
radicalmente distinto a sus anteriores ediciones, pues si anteriormente
los conciertos se encontraron enmarcados principalmente en dar
a conocer el jazz más internacional, la edición
del 2005 se ha centrado en mostrar la gran cantidad de músicos
y proyectos musicales que se están produciendo en los
últimos años en la ciudad de Barcelona. Hay que
destacar el enorme acierto por parte del programador de este
ciclo (el músico y compositor Agustí Fernández),
de conceder la oportunidad a los músicos nacionales de
presentar los distintos proyectos musicales que hay en la actualidad,
lo que habrá permitido en buena medida el dar a conocer
a unos músicos por parte del público que nos los
conocía y en particular, de confirmar una realidad existente,
y es la excelente salud de la que goza nuestra panorama jazzístico
nacional.
Dani Pérez
El Projecte Komeda/The Komeda Project
Chris Kase: Trompeta.
Gorka Benítez: Saxo Tenor.
Dani Pérez: Guitarra y arreglos.
Joan Díaz: Piano.
Raimon Ferrer: Contrabajo.
David Xirgu: Batería.
El primero de los conciertos programados en el ciclo de la
Fundació Joan Miró concedió la posibilidad
de escuchar uno de los proyectos han aparecido en el panorama
español, el proyecto del guitarrista argentino afincado
en Barcelona Dani Pérez, el Proyecto Komeda. El concierto
sirvió para dar a conocer el trabajo publicado en cedé,
y en donde se desarrollan diversos temas que Krzysztof Komeda
compuso para las bandas sonoras de Roman Polanski, entre los
mismos señalar “Rosemary´s baby”,
“Cul-de-sac”, “Knife in the water”
o “Kattorna”.
La música interpretada permitió comprobar las
atmósferas y sensualidades que las mismas sirvieron
a Polanski, y que fue desarrollado por el excelente elenco
de músicos que acompañan a Dani Pérez.
Además se pudo apreciar la perfecta compenetración
entre los músicos, así como la excelente lectura
de los arreglos que el líder ha compuesto para cada
uno de ellos y ello a pesar de una concepción de música
escrita que predomina en las bandas sonoras. En contraposición
a esta premisa, la música se desarrolló de una
forma muy libre y abierta por parte de todos los intérpretes.
De entre los músicos destacar la gran musicalidad de
Gorka Benítez, con un sonido personal e intransferible,
así como la trompeta de Chris Kase, todo ello acompañados
por una estupenda rítmica.
El concierto concedió la posibilidad de degustar uno
de los mejores proyectos musicales aparecidos en el mercado
español tanto por su música como por la concepción
en que se basa el mismo.
Albert Bover
Albert Piano: Piano.
Hoy en día no existen demasiadas posibilidades de
poder asistir a recitales de piano sólo, y máxime
cuando estos son siempre un reto para el pianista que los
afronta. La Fundació Joan Miró nos concedió
la posibilidad de escuchar a unos de los mejores pianistas
españoles de la actualidad, Albert Bover. Bover basó
su concierto en un homenaje a la música de unos de
los padres del free-jazz, Ornette Cooleman. En su recital
Bover afrontó temas de enorme carga musical hasta llegar
a uno de los títulos emblemáticos del músico
americano, “Lonely Woman”. En la interpretación
de la misma pudimos comprobar la personal versión que
llevó a cabo del tema, utilizando el piano en todos
sus registros para extraer del mismo todo tipo de riquezas
sonoras tanto del teclado como de los pedales.
El resultado de toda la música interpretada por Albert
Bover en el concierto, fue una intensa búsqueda sonora
a base de una libertad interpretativa e improvisatoria con
un estilo muy personal.
Jordi Bonell Trio
Jordi Bonell: Guitarra.
Curro Galvez: Contrabajo.
Roger Blavia: Batería.
La actuación de Jordi Bonell, una de las guitarras
de referencia de la historia del jazz español, es siempre
garantía de calidad musical. Para el presente concierto
Jordi Bonell desarrolló temas de su último trabajo
“Agua Madre”, así como de otros temas de
trabajos anteriores. El recital obedeció a lo que ha
sido la trayectoria musical de Bonell, un repertorio ecléctico
en donde desarrolla tanto temas propios como ajenos, todos
ellos con un gusto exquisito y perfectamente desarrollados,
y en ocasiones con sutiles pinceladas. La única crítica
al concierto sería que algunos de los temas adolecieron
de un exceso de empalago.
Juan Carlos Abelenda