Comentario: Se puede afirmar
que en el ZAC Jazz Club de Barcelona se han desarrollado algunos
de los conciertos más interesantes del 37 Festival Internacional
de Jazz de Barcelona, y el ofrecido por Eli Degibri & Kevin
Hays, fue uno de ellos. El concierto sirvió a los dos
músicos para dar a conocer su último trabajo discográfico
“Sprinter” (que se han financiado ellos mimos);
un disco lleno de composiciones originales tanto del saxofonista
como del pianista.
El concierto fue una auténtica delicia a consecuencia
del planteamiento que ofreció, y que no era otro que
el de interpretar diversos temas sin rítmica que les
apoyase. Los temas que se fueron desgranando contaron con
aportaciones jugosas de ambos músicos, tanto en la
expresividad musical de Kevin Hays como de Eli Degibri, así
como de las participaciones en donde era requerida una especial
compenetración entre ellos. La propuesta musical aportó
temas de excelente calado musical, algunos de ellos con un
diseño completamente improvisado, (libre en su planteamiento),
pero desarrollado un exquisito gusto y un lirismo exultante.
Otros temas por el contrario, propiciaron una búsqueda
sonora por parte de ambos músicos, ya sea a través
de la fórmula de llamada/respuesta, o de las búsquedas
individuales tanto del pianista como del saxofonista.
El único punto negativo de la velada la protagonizaron
dos temas cantados, uno a cargo de Kevin Hays y otro de Eli
Degibri, que en alguna forma vinieron a disminuir la velada
musical. Estos dos temas fueron interpretados con un pésimo
gusto y con clara falta de entonación y con momentos
de desafinación, que más vale que no hubiesen
sido interpretados, y que demostraron que ambos músicos
no tienen mucho futuro en la escena vocal del jazz. Salvo
la anécdota los temas cantados, el concierto fue un
auténtico disfrute por lo atrevido del planteamiento.