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DAVE BURRELL FULL-BLOWN TRIO 
Ciclo Jazz es primavera

  • Fecha: 23 de marzo de 2007.
  • Lugar: Colegio Mayor Universitario San Juan Evangelista (Madrid)
  • Componentes:
    Dave Burrell: piano.
    Keith Witty: contrabajo.
    Guillermo E. Brown: batería y voz.
  • Comentario: El Club de Música y Jazz San Juan Evangelista nos dejó, en la tercera jornada de este ciclo, otra noche inolvidable. El Dave Burrell Full-Blown Trio (formación por la que antes habían pasado músicos como Andrew Cyrille, William Parker y Michael Formanek) desbordó energía dentro de ese particular universo sonoro que se respira en sus álbumes Expansion y Momentum (Hight Two Records, 2003 y 2006 respectivamente).  


    La música que ofreció este grupo estuvo imbuida de una fuerza hosca y sincera. El pianista de Ohio colocaba los acordes con aparente descuido, consiguiendo que las piezas del puzzle poco a poco desvelaran el vibrante pulso interno de las composiciones. La energía esquiva que desprendían los ritmos expuestos por Burrell era contestada de inmediato por el deslumbrante trabajo de Brown a los tambores, una incansable labor de ruptura, fragmentación y recolocación rítmica cuya arrolladora creatividad y potencia supieron siempre multiplicar la fuerza de la actuación global del grupo. Witty, la más reciente incorporación a este trío, actuó como un aglutinador de los afilados sonidos de sus compañeros, a menudo usando el arco con desgarrador lirismo.   

    El concierto discurrió principalmente por la senda trazada en Momentum. Así, “Fade To Black” se benefició de una interpretación vagamente amenazadora y de un final demorado y muy expresivo;  “Coup d’Etat” nos ofreció un buen puñado de locuras tiernas a cargo del pianista, tras una presentación del tema swingueante y relajada; “Downfall” resultó potente, incisiva, rigurosa y profunda… También hubo tiempo para algunos temas ajenos a la última grabación del trío, como la maravillosa revisión de “They Say It’s Wonderful” que, primero a piano solo, y luego con la colaboración de Brown y Witty, fue descomponiéndose lentamente hasta desembocar en un furioso y sensible ejercicio de interacción e improvisación conjunta; o el tema con que abrió el concierto, durante el cual Burrell dejó buena muestra del dramatismo que sabe imprimir con su mano izquierda al sonido del piano (hubo pasajes en los que su instrumento transmitió un doloroso llanto), que nos hizo comprender que estábamos a punto de asistir a una actuación muy especial. 

    Seguramente no hay muchos músicos capaces de integrar en su obra la poliédrica tradición del jazz. Este veterano pianista no sólo es uno de esos raros y fascinantes casos, sino que en su producción ese sustrato histórico está integrado con pasmosa naturalidad en un discurso musical que se tensa vigorosamente hacia la vanguardia sin perder en el camino ni una sola de sus esencias.  

    La música de este trío -que es todo un ejemplo de interacción- está atravesada por un áspero sentido romántico, hay un lirismo esquivo pero tremendamente expresivo en sus maneras, medio oculto tras una potencia rítmica arrolladora y a la vez delicada. Con Burrell lo difícil se torna sencillo y lo imposible, real. Su música es extraña porque es ante todo insobornablemente personal y siempre llega al oyente impregnada de una turbadora sensación de profundidad.  Quienes no dejaron escapar su presentación en Madrid, bien lo saben.  

    Texto © 2007  Ricardo Arribas y Sergio Zeni
    Fotos © 2007 Pablo Neustadt
  • Más imágenes del concierto en: Ojos de Jazz: Dave Burrell Trio en el Johnny