Comentario: Un sonido onomatopéyico definió el nombre del grupo Sumrrá, denominación que nada tiene que ver con el genial “extraterrestre” Sun-Ra ni con su sonido ni con su filosofía. De esta manera el trío define claramente la ausencia de un líder natural, ya que todos son uno y el uno es todo. Composiciones propias, sonido compacto, sólido y sin fisuras, jazz europeo y vanguardista cercano a los arquetipos de la música E.S.T que a pesar de la desaparición de Esbjórn Svensson sigue siendo una referencia a nivel mundial.
Triángulo cuyos ángulos son iguales, trío equilátero donde destacan todos y cada uno, impecable técnica, empleo del swing y el dramatismo como fuente de inspiración, Manuel Gutiérrez en uno de los vértices apunta alto con su vuelo ligero y su velocidad como el rayo, Xacobe Martínez Antelo marca los tiempos como un metrónomo y completa la terna L.A.R. Legido con sus pinceladas coloristas que en ocasiones convierte en un vendaval.
En cuanto a lo visto y oído en el escenario el concierto comenzó como si tal cosa con naturalidad, sobriedad y una solemnidad reflejada en su actitud y en su vestimenta; trajeados como los men in black comenzaron por el principio de su último disco Ao Vivo, con el tema “Believe In Trane”, swingueante y de ritmo ascendente, que se pausa en una fuga para contrabajo de Xacobe Martínez Antelo. En “Chanzo” el trío es una máquina con piloto automático que desemboca en un caos disonante, creativo y consciente; “Home” es uno de los momentos mágicos de la noche, balada bien construida y bella en si misma ofrece un sonido cristalino y luminoso a la vez que solemne, el piano de Manuel Gutiérrez mantiene un fraseo equilibrado y las escobillas de L.A.R. Legido golpean los platillos como lo haría la caída de la suave lluvia. Ligero, reflexivo y poético Xacobe Martínez Antelo al contrabajo. “Nature Wine”, deliciosa pieza nocturna, relajante, serena y amable es admirada y reconocida por el publico.
“Intruso” fue el penúltimo peldaño de esta escalera que es el Johnny, que da prestigio a unos y ensombrece a otros. Pero es evidente que no es el caso de Sumrrá ya que su actuación fue convincente y sólida y que el aficionado entendido supo consagrarles como uno de los tríos más importantes del país. Con el bis “Minoría Absoluta” reforzaron aún mas sus argumentos y la sensación de haber sido aceptados por uno de los escenarios mas importantes del jazz nacional.
