>> VOLVER A TOMAJAZZ

 
 

 

   

JAMES CARTER QUINTET
XXIII Jazz en la Costa

  • Fecha: 20 de julio de 2010.
  • Lugar: Parque El Majuelo, Almuñécar (Granada).
  • Componentes:

    James Carter: saxofones
    Corey Wilkes: trompeta
    Gerard Gibbs: piano
    Leonard King: batería
    Ralphe Armstrong: bajo
  • Comentario:



    James Carter es uno de los instrumentistas de viento más carismáticos y originales de entre los surgidos en la década de los noventa. En su concierto del festival Jazz en la Costa ratificó que su filosofía de combinar el tradicionalismo con una sensibilidad cercana a las vanguardias puede garantizar una extraordinaria velada para el público.

    El saxofonista de Detroit es toda una eminencia que se sitúa entre la música con fundamento y la espectacularidad del ‘entretenedor’ a la americana para todos los públicos. Según qué proporción use cada noche sus conciertos son aplaudidos o mirados con más recelo, pero por lo escuchado en el Parque de El Majuelo este año maneja un razonable equilibrio entre sus portentosas facultades y las reglas no escritas de un concierto.



    Carter se presentó con una formación de quinteto en la que estaban sus fieles compañeros, ya de años, Gerard Gibbs en el piano, Ralph Armstrong al contrabajo,  la batería tocada por  Leonard King y el paisano Corey Wilkes en la trompeta. Desde el primer momento de “Chant In The Night”, la composición de Sydney Becket con la que comenzaron, se pudo intuir que el concierto iba muy en serio, con una banda lanzada en tromba y un líder completamente poseído por el soprano.


    Dominador de toda la gama de saxos, desde el alto hasta el barítono, también es un consumado experto en flauta y en el clarinete y clarinete bajo, aunque estos últimos los dejó en casa. Coleccionista de instrumentos y también mecánico que afina y repara los suyos, es capaz de hacer música de cualquier cosa se pueda soplar. Con un sonido espectacular que va desde el tierno susurro, hasta el más desgarrador rugido, dialoga consigo mismo a dos voces, suena como un bebe llamando a su madre o como el Titanic pidiendo socorro,  realiza llamativos juegos de respiración circular y domina las llaves como un cerrajero la suyas. Los instrumentos de viento no tienen ningún secreto para él.


    Tan respetuoso y reivindicador de sus mayores como vanguardista por definición, no tiene ningún problema en acudir a inmortales de Ronald Kirk, un irreconocible “Nuages” de Django Reinhardt, el entrañable riff del “Living my life” de su admirado Don Byas o construir una vez más la hermosísima “In a sentimental mood”, que no por escuchada una y mil veces deja de conmover, sobre todo tocada con exquisita delicadeza por esta fiera que se quitó la garras para interpretarla con la ternura requerida.

    Carter se acercó a las dos horas de concierto casi sin interrupción porque prefirió, con esa actitud de tímida arrogancia que le caracteriza, actuar sin pausas para no perder la concentración, y así apenas paró para recordar al guitarrista zíngaro Reinhardt  o dar las gracias en perfecto español. Un concierto  recordable por bastante tiempo.

    Texto © 2010 Diego Ortega Alonso
    Fotos © 2010 Ricardo Carrillo de Albornoz