BRAD MEHLDAU
Songs The Art Of The Trio Vol. 3
Song-Song / Unrequited / Bewitched, Bothered And Bewildered / Exit Music (For A Film) / At A Loss / Convalescent / For All We Know / River Man / Young At Heart / SehnsuchtBrad Mehldau (piano), Larry Grenadier (contrabajo), Jorge Rossy (batería).
Grabado en Mayo '98
(Warner 46848)
Desde la aparición del primer volumen de la serie "The Art Of The Trio" la proyección de Brad Mehldau como uno de los grandes músicos aparecidos en los últimos tiempos no ha cesado de crecer logrando la poco frecuente unanimidad de crítica y público. Para la tercera entrega, Mehldau ha vuelto al estudio de grabación y ha restado espacio a los stándars para volver a dar mayor protagonismo a su faceta como compositor, en la que supera ampliamente lo apuntado hasta ahora demostrando que ha alcanzado una madurez definitiva.
Se trata de un disco íntimo, de un lirismo arrebatador, con temas no demasiado extensos construidos de forma prodigiosa en los que se refleja más que nunca la formación clásica del pianista. La versión de "Last Exit", del grupo Radiohead, una completa recreación que parece inspirada en algún pasaje de Beethoven o Schubert, es la antítesis de la facilona utilización de melodías del pop que prolifera entre algunas de las "figuras" mimadas por las grandes compañías -uno de los ejemplos más recientes es el nuevo disco del saxofonista Joshua Redman: "Timeless Tales", cuyo único aliciente es la presencia del propio Mehldau-.
El joven pianista atesora algunas de las mejores cualidades de los grandes maestros, como esa profunda contención bajo la que sólo se vislumbra su apabullante técnica, esa que le permite crear una increíble polifonía en los momentos más vibrantes de temas como "Convalescent", o una mágica ensoñación en su insuperable lectura de "For All We Know". Tras haber podido disfrutar recientemente de sus prestaciones en vivo, esta grabación confirma que atraviesa un verdadero estado de gracia. La perfecta comunión con el exquisito melodismo de Larry Grenadier y el matiz siempre preciso de Jorge Rossy -un trío al que cada vez parece menos exagerado colocar entre los más destacados de la historia-, transmite toda clase de emociones: nostalgia, melancolía, amargura, excitación... Un disco que se adentra en el territorio de lo sublime.
BRAD MEHLDAU
The Art Of The Trio Vol. 2
It's Alright With Me / Young And Foolish / Monk's Dream / The Way You Look Tonight / Moon River / CountdownBrad Mehldau (piano), Larry Grenadier (contrabajo), Jorge Rossy (batería).
Grabado en el Village Vanguard en Julio/Agosto '97
(Warner 46848)
Brad Mehldau se ha convertido de forma casi indiscutible en el valor más sólido de ese grupo de jóvenes músicos que alcanzan la fama a través de un buen contrato discográfico y a los que en muchas ocasiones el esfuerzo propagandístico de las grandes compañías sustituye a sus méritos artísticos. No es ese su caso y cada nueva grabación vuelve a demostrarlo.
El segundo volumen que aparece bajo el pretencioso título "The Art Of The Trio" es una grabación en vivo de un puñado de estándares que sirven de excusa al joven pianista para seguir mostrando ese toque personal que ha cautivado a un buen número de aficionados y que echa por tierra los vanos intentos de buscar sus raíces en Bill Evans o Keith Jarrett. Puede que haya algo de ambos (sobre todo de su concepción del trío) en el toque lúcido y melancólico de Mehldau, pero también lo hay de otros muchos en lo que es ya un inconfundible estilo propio.
En estas seis extensas versiones (todas por encima de los 10 minutos) el pianista encuentra nuevos ángulos hasta en melodías tan concocidas como la del "Moon River" de Mancini, pero es sobre todo el denso arranque a piano solo de su "tour de force" favorito, el coltraneano "Countdown" (que ya ha grabado en tres ocasiones), el que mejor revela su portentosa técnica y la notable originalidad de sus ideas. Aunque el trío se ha revelado como su formato preferido, con el que a buen seguro seguirá publicando discos tan disfrutables como éste en los próximos años, entre sus proyectos más inmediatos figura precisamente el de enfrentarse al piano solo, un reto que a la vista de lo oído aquí puede resultar más que interesante.