A mediados de los 60, Ornette Coleman presentó en Los Ángeles a dos músicos que venían de Texas, el trompetista Bobby Bradford y el saxofonista y clarinetista John Carter. Carter y Bradford formarán entonces uno de los grupos más estimulantes, originales y rigurosos de esos años: el New Art Jazz Ensemble. En 1969 aparece el disco Seeking en el sello angelino Revelation. Un disco equilibrado, profundo y potente en cada uno de los aspectos que va perfilando, y lleno de ideas, de buenas ideas. Una música que se inscribe en el free jazz de aquellos años, pero marcando unas diferencias muy claras respecto de otros centros de producción: menos literario e histriónico que el neoyorquino, y no tan comprometido con su historia y autoconsciente como el de Chicago. Su vía era netamente más estética, más abstracta tal vez, y en cualquier caso no tan dolorosa ni incendiaria. Una modulación absolutamente personal y heterodoxa de una corriente que ya de por sí era heterodoxa y arriesgada. Esto, de rebote, permitía que en su particular modo de entender el free cupieran remansos de belleza casi insólitos. A continuación llegarían otras tres entregas discográficas, ya bajo el nombre de John Carter & Bobby Bradford Quartet: Flight for Four (Flying Dutchman, 1969), Self Determination Music (Flying Dutchman, 1970) y Secrets (Revelation, 1972); todos ellos consecuentes con aquella «búsqueda» inicial.
En la parte inferior de la portada de la edición original en vinilo de Seeking había la siguiente leyenda: «The west coast finally has its own resident, free-form jazz group: it is a beautiful and exciting thing». Cuando años más tarde el sello suizo Hat Art lo reeditó en CD, la portada en blanco y negro mostraba unas señales de tráfico con una advertencia de limitación de velocidad a causa de curvas. Las señales estaban junto a uno de esos característicos cactus en un desierto del oeste.
Seleccionado y comentado por Jack Torrance