Festival Les Nits D’eus 2014
- Fecha: Sábado, 20 de setiembre de 2014
- Lugar: Maison du temps libre, Eus (Conflent / Francia)
- Componentes:
Primera parte
Philippe Mouratoglou, guitarra
Svetlana Tovstukha, violoncheloSegunda parte
Stephan Oliva, piano
Jean-Marc Foltz, clarinete y clarinete bajo
Comentario:
El pasado 14 de setiembre se clausuró el 26º Festival internacional de fotografía VISA pour l’image, que se celebra desde el año 1988 en Perpiñán. Durante 16 días se pudo visitar, de forma gratuita, las 26 exposiciones de esta edición, entre ellas el World Press Photo.
En el editorial del programa de mano, el director general del evento, Jean-François Leroy, escribía: “Una revista de noticias publica una foto de las primaveras árabes por 0’58€. ¿Y cuánto pagan por una foto del muro de Berlín? 0’88€. Todo va en esta proporción”. “Ya es hora que todos los actores, productores, distribuidores y compradores de fotos de calidad se den cuenta que, accediendo a las demandas más desorbitadas de los asesores financieros, están cavando la tumba de este negocio”.
Por citar sólo cuatro trabajos, que bien podrían ser otros cuatro, destacaría el de Jorge Silva “la torre de David” sobre el rascacielos “barraca” de 45 pisos del centro de Caracas. La desmitificación del águila de cabeza blanca, símbolo nacional de los USA, de Klaus Nigge. “Mongolia: El Dorado no existe” de Olivier Laban-Mattei, y el ganador del Visa de oro humanitario 2014, William Daniels por su duro trabajo “Crisis humanitaria en la República Centroafricana”.
Desde la 20ª edición, el festival edita un catálogo, totalmente recomendable, con una selección de unas cinco imágenes por exposición, complementadas con una breve reseña en francés e inglés.
Seis días después, el sábado 20, a unos cuarenta kilómetros de Perpiñán, en la pequeña localidad de Eus, vecina de Prades de Conflent, se clausuraba el festival de música Les nits d’Eus, en la Maison du temps libre -con una interesante panorámica del valle así como del macizo del Canigó-.
Dos conciertos, ambos a dúo, sin amplificación alguna, permitiendo disfrutar de las sonoridades propias de cada uno de los instrumentos. Remarcar que el silencio de los presentes era de los que se pueden cortar con estilete.
La primera parte corrió a cargo del guitarrista Philippe Mouratoglou con la violonchelista rusa, residente en Barcelona, Svetlana Tovstukha. Ofrecieron un temario de corte clásico (Falla, Piazzolla,…) donde dejaron plenamente claro las cualidades y capacidades de cada uno, así como la interacción y complementación entre ambos.
La segunda parte, máxima responsable de que hubiéramos cruzado nuevamente la frontera, correspondió al dueto formado por dos grandes músicos, instrumentistas y compositores, de la escena jazzística/contemporánea del hexágono francés y, desgraciadamente, como tantos otros músicos vecinos, prácticamente desconocidos en el estado español, más allá de los seguidores más militantes. El pianista Stephan Oliva y el clarinetista Jean-Marc Foltz. Los dos con una amplia e interesante obra discográfica, de calidad contrastada y concepción bien variada.
Ambos son los responsables musicales, composición, interpretación e improvisación, de la película-concierto Homenaje a Segundo de Chomón, uno los grandes pioneros del cine de animación y de los efectos visuales. La parte fílmica está constituida por tres cortometrajes del creador aragonés, restaurados por el Museu Nazionale del Cinema de Turín.
A su vez Oliva, en formación de quinteto, con el también pianista François Raulin, son los creadores musicales de otro proyecto con el binomio música-cine, en esta ocasión alrededor del mundo onírico del personaje Little Nemo.
Destacaría también, sólo para remarcar otro proyecto, el interesante dueto de Stephan con la trapecista Mélissa Von Vépy.
En Eus ofrecieron el exquisito proyecto Visions Fugitives (2012), título homónimo de la composición de Serguei Prokofiev, que a su vez da nombre, en singular, al sello discográfico compartido a tres bandas entre Jean-Marc Foltz, el guitarrista Philippe Mouratoglou y el productor y grafista Philippe Ghielmetti (responsable del desgraciadamente desaparecido sello discográfico Sketch, remarcable tanto por la calidad musical de sus propuestas como por sus acabados gráficas. También es artífice de la parte gráfica del sello La Buissonne).
La discográfica Vision Fugitive tiene como ideario publicar sólo tres producciones anuales (hasta la fecha ya cuentan con ocho grabaciones), sumamente mimadas, con destacables acabados, todas con su libreto y las portadas/contraportadas con reproducciones de las pinturas realizadas por Emmanuel Guibert, dibujante y guionista de cómics.
Me gustaría citar, además del mencionado Visions Fugitives, Le long de la plage (2012), del dueto, piano-recitador, Marc Copland-Michel Butor (uno de los máximos responsable de la Nouveau Roman) y Viracochas (2013) –proyecto presentado en el festival de Eus de 2013-.
Regresemos de nuevo a la última noche del Festival de este año, precisamente con la obra inicial y generadora de Visions Fugitives, un trabajo de orfebrería, tanto en el aspecto conceptual como en el formal. Trabajo que en el directo que pudimos disfrutar, subió unos cuantos escalones, empresa nada fácil teniendo en cuenta el referente.
Temas de Poulenc (“Romanza”, el segundo movimiento de la “Sonata para clarinete y piano”, compuesta para Benny Goodman, que tenía que ser interpretada al piano por el propio compositor, pero que malogradamente falleció unos tres meses antes del estreno; Leonard Bernstein fue el encargado de acompañar al clarinetista), Brahms, Berg, Coltrane (“Naima” y “Lonnie’s lament”), entrelazadas entre composiciones propias e improvisaciones, consiguiendo sobrada y exquisitamente los objetivos especificados por el propio clarinetista, “hacer desparecer la noción de tiempo y de espacio”, a lo que cabría añadir la desaparición de fronteras estilísticas entre la clásica, el jazz y la improvisación.
Unas improvisaciones en perfecta consonancia y disolución con las partes escritas. Un trabajo donde la cualidad y la calidad del sonido son partes intrínsecas e inseparables del discurso/diálogo musical.
Texto y fotografías: © Joan Cortès, 2014
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