- Fecha: jueves, 07 de octubre de 2021
- Lugar: La Jazz Cava (Vic -Barcelona-)
- Grupo:
Jordi Sabatés “Pianíssim”
Jordi Sabatés, piano
El Festival de Jazz de Vic, desde hace años, inaugura su programación con un piano solo, el denominado “Pianíssim”. En anteriores ocasiones le correspondió, entre otros, a Albert Bover, Josef Demoulin, Giovanni Di Domenico, Agustí Fernández, Marco Mezquida (dos veces) o Xavi Torres.
En la edición de este año, trasladada de primavera a otoño, ha correspondido, a todo un histórico y peso pesado del jazz estatal, Jordi Sabatés (Barcelona, 1948), que nos ofreció una clase magistral de su saber hacer, tanto a nivel musical como en el pedagógico -con sus breves y amenas explicaciones-.
Un concierto trenzado en tres ejes, su querencia por el ragtime y afines, composiciones para bandas sonoras y, lo que el pianista denominaba, de entorno mágico, que le permitió pasearse por su dilatada obra. Duró una hora y media, que paso volando y que hubiera podido durar bastante más, desarrollada de forma dinámica, variada y exquisita.
Un repertorio de composiciones propias que básicamente transcurrió por la suite “Joc Partit”, en homenaje a los grandes del Ragtime y del Boogie-boggie; “Ligeia” y “Stonehenge” del disco Vampyria (1974), grabado a dúo con Tete Montoliu (considerado como el mejor disco de la historia del jazz en Cataluña, según una serie de críticos reunidos por la desaparecida revista “Jaç”-jazz de pronunciación); “Annesa” del disco Tot l’enyor de demà (1976), recordando el solo que grabó Montoliu; “Lady Harimaguada”-en relación a una serie de educadoras y ritualistas canarias-, “Dama de noche” y “Ectoplasma de Jelly Roy Morton” de su último disco Maverick (2016 ) o “Nana para bola” tema original que escribió para la banda sonora del documental Bola de Nieve, el hombre triste que cantaba alegre (de José Sánchez-Montes / 2003), un encargo donde no podía utilizar ningún tema del pianista cubano. También interpretó fragmentos de tres montunos, de composición propia, para comentar la semejanza y procedencia del ragtime.
Un dinámico, amplio y selecto repaso de su obra, en el cual hizo un paréntesis para regalarnos un estreno absoluto, “Dama de Cuba”, otra delicia en una noche trufada de ellas. Un concierto que dedicó a la memoria de su hermano, el guitarrista Ricky Sabatés, que falleció el pasado mayo.
Un placer musical disfrutado en la corta distancia de la pequeña y entrañable jazz cava osonense, con un aforo totalmente encandilado de cuarenta personas (normas covid).
Tomajazz: © Joan Cortès, 2021
Más información sobre Jordi Sabatès en Tomajazz
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