Fecha: Miércoles, 23 de enero de 2013
Lugar: Jamboree / Barcelona
Componentes:
Diego Amador: piano y cante
Llibert Fortuny: saxo tenor, soprano y pedales
Jesús Garrido: bajo eléctrico
Israel Varela: batería y palmas
Comentario: Un inicio de 2013, flamenco, flamenco, en Barcelona, donde se ha podido disfrutar, entre otros, del cante de Manuel de Paula, José Antonio Martín “Salao” –acrecentándose paso a paso- y Mayte Martín –siempre excelente que ha estrenado su magnífico e irreprochable Por los muertos del cante-, así como los no menos interesantes guitarristas Paco Cortés –de toque maestro-, José Andrés Cortés, Juan Ramón Caro y José Luis Montón –único músico del estado español que ha grabado, a su nombre, en el prestigioso y singular sello alemán, ECM, sello discográfico, entre otros del irascible y genial Keith Jarret-. Actuaciones enmarcadas en distintos espacios y eventos de la ciudad.
Cinc nits amb Mario (Cinco noches con Mario) es el nombre que corresponde al plato fuerte de la programación del mes de enero del Jamboree, programación que ya corre a cargo, desde principios de año, del periodista y comentarista musical, Pere Pons, hombre de gustos eclécticos, director de la desaparecida revista Jaç (sonido fonético en catalán de la palabra jazz, además del significar “lecho”, recordando que en los prostíbulos de New Orleans, en los albores de jazz, además de otras actividades también se podía escuchar esta música) y responsable del programa de ràdio 4/rne L’home del jazz.
Cinco noches con Mario, quiere ser un pequeño homenaje a Mario Pacheco (1950-2010), productor musical, fotógrafo, creador y responsable del sello discográfico Nuevos Medios, amante de estilos musicales bien diversos, especialmente del flamenco de tintes y colores más modernos, cuando no más bizarros y mestizos.
El homenaje se configura en dos vertientes, la primera mediante una exposición, que permanecerá hasta finales de junio, de fotografías de Pacheco, en blanco y negro riguroso, donde se muestran retratos de Enrique Morente, Camarón de la Isla, Jimi Hendrix, Martirio, entre otros. La segunda vertiente corresponde a la actuación, a lo largo de cinco noches y en programación doble, de dos músicos, el pianista sevillano, Diego Amador, y el saxofonista canario-catalán, Llibert Fortuny. Dos músicos muy apreciados por Mario, que nunca habían colaborado anteriormente, dos músicos con gustos y trayectorias bien diferentes, pero que ambos grabaron sus tres primeros trabajos discográficos en el sello Nuevos Medios. El retrato de Diego Amador también está en la exposición, con la foto que corresponde a la portada de su primer disco El aire de lo puro (NM,2001).
Diego Amador vino con su nuevo, flamante y cuarto trabajo discográfico, Live in Paris / Flamenco Jazz Tribute. Disco parco en información, no se especifica ni donde ni cuando se grabó este “live”, pero como bien indica su subtítulo, se trata de un tributo, un tributo a diferentes músicos, a los flamencos, Juan Talega, José Monje Cruz “Camarón” y Paco de Lucía, así como a los jazzistas, Luis Salinas, Chick Corea, Bill Evans y Duke Ellington. Diego Amador, como flamenco de estirpe que es, se introduce en el jazz desde el flamenco, y se agradece, siguiendo la corriente inversa dominante, o sea, es un flamenco que se acerca y se imbuye perfectamente en el jazz, y no un jazzísta que se encamina hacia el flamenco. Esto se nota en la forma de encarar las frases, las líneas melódicas y las pulsaciones rítmicas, así como en la variedad de palos flamencos tratados, soleá, alegrías, tangos, buleria, rondeña, fandango, soleá por bulería, rumba y tanguillo. Por decirlo de forma simplificada, hay más flamenco que jazz.
Su tributo, a los músicos mencionados, consiste en tomar un breve fragmento o motivo de un tema conocido de los homenajeados y desarrollarlo por caminos, senderos y conductos personales. Así por ejemplo, en el “A tito Haden” el fragmento corresponde al maravilloso “First song”, el “A Bill Evans” corresponde a “You must believe in spring” o el “A Duke Ellington” el motivo es Caravan. Remarcar, también, que aparte de tocar el piano canta, canta en flamenco puro, en algunos de los temas. Diego dispone de excelentes mimbres tanto tocando el piano, como cantando, con una voz de escuela camaroniana. Posiblemente sea el único pianista de flamenco-jazz o jazz-flamenco que canta a su vez flamenco, al menos este comentarista no conoce a otro, y como le decía el propio Pacheco, relacionando el piano y el cante, “Eres el Ray Charles gitano”.
Los dos solistas fueron, en todo momento, propulsados por la máquina rítmica que forman el sevillano Jesús Garrido al bajo eléctrico de cinco cuerdas, bien musculado y andante, y el batería mexicano, que sorprendió por su versatilidad al pasar, cuando no, de hacer confluir los patrones de jazz-fusión con los del flamenco, como si Tijuana, ciudad natal de este interesante músico, fuese la segunda capital del flamenco andaluz.
Llibert Fortuny, estuvo algo comedido, más en la primera parte que en la segunda, pero dejó muestras más que palpables de su notable quehacer y talante explosivo, detonante con el saxo tenor, lírico con el soprano y delicado con los pedales, consiguiendo momentos de homónima interacción con los otros tres músicos e incluso en la segunda parte atreviéndose con alguno de sus queridos friquismos.
Diego Amador sorprende muy gratamente por su capacidad de aunar conceptos jazzísticos bien distintos, de los melódicos a los rítmicos, de los clásicos a los más cercanos a la contemporaneidad, sin perder un ápice de credibilidad. Pero si esto no fuera suficiente, le da unas cuantas vueltas más a la tuerca, y lo enlaza, en un continuo sin roturas ni pausas, con el flamenco, con un flamenco de solera, bien timbrado y sentido. Como fehacientemente queda de manifiesto en el paso del bello y elegante motivo de “First song” que lo lleva de paseo, en un fluir continuo, por los aires gitanos de su vos rasposa y precisa.
En la primera noche, los dos pases superaron la hora y media, con una natural y total entrega, predisposición, capacidad, saber estar y calidad. Sin duda se cumplieron las mejores expectativas de la programación estrella de este inició de año en la jazz cava del Jamboree.
Texto y fotografías: © 2013 Joan Cortès
