Erik Friedlander se estrenó con la formación con que ha grabado Nighthawks en 2011 con Bonebridge. Tal y como ocurría con esta grabación, por encima de las distintas influencias que aparecen en cada uno de los temas, hay cuatro grandes músicos (Doug Wamble a la guitarra, Michael Sarin a la batería, Trevor Dunn al contrabajo y Friedlander al chelo), y sobre todo unas muy buenas composiciones de Erik Friedlander.
El cuadro de Edward Hopper «Nighthawks» («Noctámbulos» en español) es el que da título a un CD en el que no sólo se homenajea al cuadro en cuestión y a las sensaciones que transmite, sino que también hay una referencia directa a su autor con el tema de aire country «Hopper’s Blue House», en la que Erik Friedlander utiliza varias pistas para crear un magnífico apoyo con su chelo, contraponiendo el pizzicato y el empleo del arco. La variedad en las referencias es notable. «26 Gasoline Stations» parece escrita para una película de cine negro. «Clockwork», a medio tiempo, tiene un swing directo, y una magnífica combinación entre los cuatro instrumentistas. «Sneaky Pete» (no confundir con el tema que abría el LP Sonic Boom de Lee Morgan) es una pequeña joya que puede traer a la memoria la música de Bill Frisell. Otra referencia, Pat Metheny, también hace acto de presencia en la melancólica «Nostalgia Blindside». «Carom» es un tema intenso y nervioso que a lo largo de su desarrollo alterna referencias sonoras al Oriente Medio y a Sudamérica, mientras que «One Red Candle» es un tema lleno de quietud y nocturnidad. El country está nuevamente presente en «Poolhall Payback», mientras que «The River» es un tema que comienza a medio tiempo con aromas a fusión en el que se maneja y resuelve la tensión de un modo magnífico.
© Pachi Tapiz, 2014
Erik Friedlander: Nighthawks (Skipstone, 2014)