Jamboree Jazz Lab Experience
- Lugar: Jamboree (Barcelona)
- Fecha: Martes, 19 de febrero de 2013 (1er pase)
- Componentes:
Giulia Valle: contrabajo
Pablo Selnik: flauta
David Soler: guitarra eléctrica y efectos
Oriol Roca: batería
+ invitados
Rusó Sala: voz
Edurne Arizu: acordeón - Comentario:
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Se hace difícil definir a priori este nuevo proyecto de Giulia Valle que lleva como nombre Libera. De entrada podemos decir que es bastante distinto a su grupo habitual, aunque naturalmente se pueden reconocer algunos rasgos o similitudes, tal vez el mismo espíritu inquieto que hay tras ambos planteamientos. Pero, tanto musicalmente como, presumo, en las intenciones parecería que Libera se dirige hacia otro lugar, que pretende acceder a otra parcela de la sensibilidad. De entrada me gustaría decir que esa palabra que denomina el proyecto puede llevar a engaño: Libera, libre, free… Pero no es free jazz, para nada. En todo caso esa “liberación” vendría a tener otro sentido y tendría más que ver con la posibilidad de tratar algunos géneros musicales que habitualmente no suele tratar la contrabajista en su grupo. Estaríamos hablando de ritmos o géneros más “populares”, dicho esto con cierta reserva, o para ser más precisos, más inmediatos, más directos.
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En el fondo la idea de Libera es muy sencilla (creo que es mejor hablar de idea que de concepto en este caso). La sencillez siempre es algo que juega a favor, y en este caso la cosa consistiría en plantear los temas, las composiciones originales de Valle como planos bastante diáfanos que se pueden ir completando, sobre los que se puede ir trabajando. Es decir, son temas, sí, pero que cada día pueden crecer, renovarse, expandirse. A pesar de ser bastante reconocibles, o con líneas principales bien marcadas, nunca se tiene la sensación de estar ante una pieza cerrada y completa, sino ante algo que se está formando y desarrollando ante nosotros. De hecho, esto explicaría porque han entrado tan bien el acordeón y la voz durante la residencia que el grupo ha hecho durante el mes de febrero en la sala Jamboree, teniendo en cuenta que el proyecto de base es un quinteto. O porque puede faltar la trompeta de Pastor (que no estaba en el pase al que asistimos) sin que ello suponga un pérdida substancial. Es decir, que si falta un miembro, falta y se nota, obviamente, pero no es imprescindible. Otro ejemplo aún, durante su residencia el grupo ha padecido el azote de la epidemia de gripe, motivando varias incidencias, como una sustitución del batería el primer día, una cancelación el segundo… O sea, que a pesar de los contratiempos que han supuesto cambios y ausencias, la música del grupo ha seguido siendo en esencia la misma.
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Una de las cosas que también hay que mencionar de Libera es su composición. Valle ha seleccionado a un grupo de músicos jóvenes distintos entre sí pero muy versátiles. El guitarrista David Soler viene siendo conocido por su tendencia a aplicar efectos y electrónica a la guitarra, a modificar su sonido, a crear atmósferas. Pablo Selnik es un flautista exquisito que tanto puede resultar muy lírico como ser de lo más hiriente. De ambos se aprovecha bien Valle. Por su parte, Oriol Roca juega aquí un rol más contundente de lo que suele ser habitual en él, haciendo ritmos de más pegada y dejando sutilezas percusivas para momentos muy contados. David Pastor, que no pudimos ver integrado en el grupo en el pase al que asistimos, es asimismo un trompetista con un sonido bien reconocible, incisivo y fuerte, que seguro que se integra a la perfección en Libera (como así me confirmó Joan Cortès, el fotógrafo de esta crónica, que sí pudo asistir al segundo de los pases).
- El concierto de ese primer pase se inició con “Plain Air”, una pieza suave, ambiental, que iba asentándose poco a poco y tomando su lugar, y que estaba interpretada por los cuatro miembros regulares (Valle, Selnik, Soler y Roca) más el acordeón de Edurne Arizu. Este tema ya situó bastante bien el sonido general del grupo, al tiempo que nos permitía ver el peculiar papel del acordeón en el contexto de Libera: como una especie de órgano sutil y suave. A continuación hicieron “Guayaba”, un tema cambiante que tras un ataque conducido por un frenético pizzicato se pasea por distintos estilos. Su parte central tiene una estructura curiosa, que consiste en, por un lado, una especie de dub sostenido por el bajo y la batería, y por el otro, unos ‘pinkfloydianos’ punteos de guitarra eléctrica que dan pie a una capa de sonido celestial a la que se unen la voz y la flauta (heavenly creatures). El siguiente tema, “Punk”, se iniciaba con una prospectiva y ruidosa introducción por parte de efectos de guitarra y percusión. Tras ello, el tema deriva hacia una especie de “punk”, sí, pero para ser más precisos hacia ese tipo de punk melódico o más ‘popero’, con un tramo final muy enérgico y sudoroso.
- El cuarteto, ahora sin voz ni acordeón, volvía a instalarse en el escenario para hacer el tema “Nadie”. Música suave, casi campestre, con un tempo “tirado” y con una cadencia y un sonido que por momentos volvía a recordarme a los Pink Floyd de More, o a la trama de More directamente. Terminaron con una versión que me sonó a regalo: el tema principal de Rosemary’s Baby (La semilla del diablo). Fue una versión que les quedó muy de banda sonora de los 60, sobre todo por la combinación de la flauta y la voz. Pero, este tema de Komeda también lo leyeron en clave de jazz nocturno (Badalamenti), dibujando a veces contornos demoniacos (heavenless creatures). En cualquier caso una versión de un highlight cinematográfico hecha con un manifiesto gusto por ese medio.
- Antes de terminar, decir que esta serie de conciertos de Libera se enmarcaban dentro de las nuevas «Jazz Lab Experience» que son unas residencias mensuales que con frecuencia de un concierto semanal permiten a un grupo determinado tener un rodaje en directo presentándose ante el público de Barcelona, con la garantía y seguridad que ofrece el realizar una serie de conciertos seguidos en un mismo espacio. Esto, que antes era bastante normal, es algo que se ha ido perdiendo y que sería bueno recuperarlo. En el caso que nos ocupa, ambas ideas, la de Libera y la de esta programación, casaban muy bien.
© Texto: Jack Torrance, 2013
© Fotografías: Joan Cortés, 2013
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