La pianista japonesa Hiromi Uehara acaba de grabar con su banda Sonicbloom su nuevo CD Beyond Standard, un vistazo a algunos standards de jazz antiguos desde su particular visión de la música. Pequeña en tamaño, enorme en cuanto a energía artística, actuó en Madrid el pasado 3 de julio de 2008. Por la tarde Arturo Mora tuvo la oportunidad de entrevistarla en la recepción de su hotel.
ARTURO MORA: Para empezar, ¿qué te gustaría contarnos sobre tu nuevo disco Beyond Standard?
HIROMI: No lo sé (risas). Es una pregunta muy abierta. Quería hacer un disco de canciones que no fueran mías, elegí los temas que he estado tocando durante más de diez años y he intentado que suenen como si fueran míos.
ARTURO MORA: ¿Por qué elegiste para este proyecto de standards a tu grupo Sonicbloom en vez de a tu trío de piano?
HIROMI: Porque cuando estaba de gira con esta banda descubrí un gran potencial, quería expandir mi grupo. Sabes, mi grupo siempre está en el filo. Siempre estoy intentando tomar riesgos en la música, siempre busco el mayor reto, y no podía imaginarnos tocando standards, porque esta es una banda muy poco estándar, así que pensé que podía ser interesante.
ARTURO MORA: ¿Cómo conociste al guitarrista David “Fuze” Fiuczynski?
HIROMI: Le conocí en Boston, yo era una gran admiradora de Fuze y su grupo, los Screaming Headless Torsos. Incluso antes de ir a Estados Unidos uno de mis mayores objetivos era conocerle en persona. Le invité a tocar en mi primer disco como artista invitado, y entonces sentí algo muy especial, y pensé: “sí, quiero hacer un disco entero con él algún día”.
ARTURO MORA: ¿Te inspira la presencia de Fuze cuando escribes o arreglas?
HIROMI: Sin duda, como en el tema “Caravan”, no creo que pudiera haberlo hecho sin él. Como admiradora siempre quise escucharle tocando ese tema, y sabiendo que Fuze iba a tocar la melodía, pues vale, ¿qué más puedo hacer?
ARTURO MORA: ¿Has pensado alguna vez en incluír algún instrumento de viento en tu grupo, como un saxo?
HIROMI: Sí, fui a Berklee y estudié arreglos y composición, y estudié los instrumentos que no toco, así que…
ARTURO MORA: ¿Qué nos podrías decir sobre la sección rítmica que va a tocar contigo esta noche?
HIROMI: El batería es Jordan Perlson, fuimos juntos a la escuela, es un batería genial, tiene un toque increíble, mucha técnica. Fue a Berklee conmigo, como el bajista, Tony Grey.
SERGIO CABANILLAS: ¿Aún sigues tocando con Martin [Valihora, el batería del disco]?
HIROMI: Sí, ahora está haciendo cosas en su país [Eslovaquia]. A veces cuando alguien está con sus cosas cambiamos de músicos. Es divertido, realmente lo disfruto. Al principio siempre es difícil. A veces toco con John Shannon, un guitarrista fabuloso, es increíble. Todo el mundo tiene distintas facetas, y la música cambia y se va cocinando sola y es muy interesante. Cuando digo algo cada músico me responde de una forma diferente, y eso me hace pensar en otra idea, así que siempre es interesante.
ARTURO MORA: Navegando por tu página web he visto tu photoblog. Parece que has estado haciendo algo de turismo por Madrid estos días…
HIROMI, ¡Sí, claro! De verdad quería ir a Aranjuez. En septiembre hice un disco con Chick [Corea], aún no ha salido, sólo en Japón. Tocamos “Spain” juntos, y tocamos el “Concierto de Aranjuez”, y quería ver de dónde surgió esa música, es bueno conocer su origen.
ARTURO MORA: Las fotos y el texto que incluyes en ese photoblog, ¿son algo así como una terapia para alejarte un rato del mundo de la música?
HIROMI: Lo hago por comunicarme con mis fans, actualmente me divierte especialmente conocer a japoneses. Lo empecé porque me di cuenta de que Japón está muy lejos de Europa y de los Estados Unidos, y puedo contar tantas cosas, especialmente sobre comida [risas], que quiero mostrar a la gente lo que puedes conseguir en otros sitios. Es divertido, ¿sabes?
ARTURO MORA: ¿Qué diferencias encuentras entre el público europeo, el estadounidense y el japonés?
HIROMI: Bueno, realmente depende del contexto en el que sucede el concierto. A veces es distinto cuando es en un auditorio o en un club de jazz, o cuando es al aire libre o en local cerrado, es distinto en Barcelona que en Madrid, o en Tokio que en Osaka. Osaka se parece más a Barcelona y Tokio a Madrid. Lo importante sucede cuando el público grita y se convierte en parte de la música y crea energía. Pero también disfruto de los públicos tranquilos, mientras haya concentración.
ARTURO MORA: Acabas de mencionar la palabra “energía”, que parece ser clave en tu música, la has usado muchas veces y es un concepto muy importante cuando tocas en directo. ¿Cómo enfocas esa energía en el piano?
HIROMI: Bueno, para mí el piano tan sólo es una herramienta. La razón por la que toco música es que me encanta la gente, me encanta hacer feliz a la gente. Y sé que puedo hacerles felices con el piano. Estuve en Taiwan, no hablo una palabra de chino y no entendía nada de lo que decía el presentador. Subí al escenario, por supuesto no conocía a nadie del público, no hablaban mi idioma, pero en cuanto empecé a tocar el piano estábamos todos unidos, y me sentí como en casa. El poder de la música es asombroso.
ARTURO MORA: ¿Haces algún tipo de deporte o ejercicio para mantener viva esa energía?
HIROMI: Hago yoga. Principalmente para la fatiga ocasionada por el viaje y los conciertos. No sólo por tocar en directo, sino también por llevar mi teclado en su bolsa, y mi gran maleta [risas].
ARTURO MORA: Siendo tan joven has conseguido un gran éxito. ¿Qué esperas de tu carrera a largo plazo?
HIROMI: Bueno, hay tantas cosas que me gustaría hacer en música. Tocar tal tipo de música, o tal otro. Tan sólo espero seguir tocando, no importa el qué. Para mí seguir haciendo lo que te encanta es algo bello, seguir esforzándote por ser mejor y ver paisajes que no habías visto antes. Quiero ver más, y cuanto más consigues más quieres, así que es una historia interminable [risas].
ARTURO MORA: ¿Con qué músicos vivos te gustaría tocar?
HIROMI: Es difícil, hay tantos… [duda]. La gente a la que me gustaría conocer en persona y con la que me gustaría tocar no son los mismos. A veces te encanta un músico, pero no te ves tocando con él. La persona con la que realmente me gustaría tocar está muerta, es Frank Zappa. Realmente puedo escucharme tocando con él. Pero ya no está aquí, así que en mi próxima vida, o quizá en el cielo… Sigo esperando [risas]. En cuanto a músicos vivos es difícil, porque no lo sabes hasta que no tocas con ellos. Cuando me llaman voy, toco y las cosas pasan o no pasan, y entonces decides.
ARTURO MORA: ¿Qué música estás escuchando actualmente?
HIROMI: No sé por qué éstos son días de Red Hot Chili Peppers. También estoy escuchando a Rachmaninoff. Esta mañana estaba oyendo a Errol Garner.
ARTURO MORA: Ese es un ramillete de estilos muy amplio.
HIROMI: Es amplio, pero todo me inspira, es música que se adapta a mi estado de humor del momento. Creo que a veces es incluso peligroso tener tanto conocimiento sobre la música, porque sabes que Errol Garner es un pianista de jazz, sabes en qué era vivió, pero quizá mi compañera del instituto no tiene ni idea sobre ello y sencillamente me dice: “mola, ¿está vivo?”, y esa es la impresión que deberíamos tener. Hoy he ido al Museo Reina Sofía, y me encanta ver cuadros, pero realmente no sé mucho sobre el tema, y cuando me llega me encanta, me da igual que sea un pintor famoso o no. Si me gusta algo intento saber más sobre esa persona.
ARTURO MORA: Así que supongo que para ti será difícil describir tu propia música.
HIROMI: Supongo que hago música porque no la puedo describir con palabras, quizá gente como tú puede hacerlo, porque eres un profesional de esto, si no yo sería escritora [risas].
SERGIO CABANILLAS: ¿Sueles escuchar rock progresivo?
HIROMI: Sí, soy una gran admiradora de King Crimson y Gentle Giant. No conocía a Gentle Giant hasta el año pasado, y alguien vino y me dijo: “¡tienes que escuchar a Gentle Giant, te va a encantar!”.
SERGIO CABANILLAS: Quizá tu música se podría definir como “jazz progresivo” [risas], porque en todos tus temas hay un montón de movimientos diferentes, como en un tema de Yes. Por eso me preguntaba si sueles escuchar ese tipo de música.
HIROMI: Sí. Sabes, cuando estuve en Londres Bill Bruford vino a mi concierto, dijo que era amigo de David Fiuczynski, y yo me puse: “¡Oh, Dios mío, Bill Bruford está aquí!” [risas]. Realmente me encanta la música que se vuelve loca, para mí ese es el mejor cumplido, sabes, cuando alguien escucha mi música y me dice: “es una locura”. ¡Sí, eso es, me encanta! [risas].
ARTURO MORA: ¿Cuáles son tus próximos proyectos?
HIROMI: Vamos a seguir de gira, hay un montón de festivales ahora. Estoy escribiendo para orquesta. Estoy fascinada con Rachmaninoff y Stravinsky y todos esos. ¿Por qué los pianistas clásicos no tocan sus propias composiciones hoy en día? Si realmente me encanta Rachmaninoff, ¿debo tocar sus piezas? No, porque él ya las tocaba, así que quizá pueda escribir algo para mostrarle mi respeto.
ARTURO MORA: Has estado trabajando en ello durante algún tiempo, ¿verdad?
HIROMI: Llevo cinco años intentando escribir para orquesta y aún sigo trabajando en ello. Tengo pequeños fragmentos, pero no estoy verdaderamente satisfecha con ello, así que seguiré escribiendo hasta que sienta que lo puedo llevar a un escenario.
Texto © 2008 Arturo Mora Rioja
Fotos © 2008 Sergio Cabanillas