Queridos Amigos (as),
El precinto del Bogui hace ya 6 meses ha destruido, además de una empresa, una pequeña familia. Durante esos 6 meses unos 800 artistas habrían actuado sobre el escenario del club y unas 10.000 personas habrían disfrutado con el arte de esos músicos.
Desde el primer momento y hasta el día de hoy me he sentido abrumadoramente arropado por esos artistas y por todos vosotros que formáis parte de esa pequeña gran familia del jazz a quien yo cariñosamente llamo los moteros del jazz.
¿Y qué decir de mis colegas? Germán y Nanye aparecieron enseguida al oír el primer disparo y no han hecho otra cosa que brindarme su incondicional apoyo en todo momento pero sobre todo, su AMISTAD. Si las paredes del Bogui están impregnadas con la música de tantos magníficos jazzmen que os voy a contar de Clamores y el Café Central?
El Bogui volverá a abrir sus puertas—o no. Un club de jazz puede desaparecer pero no el jazz. Me inspiro y casi plagio a GOETHE al manifestar que el jazz, como todos los sublimes bienes del espíritu son del mundo entero, no pertenece a ninguna nación, y solo puede nutrirse con el libre influjo de todos los contemporáneos, respetando siempre lo que el pasado nos legó. Así pues, la Administración local no podrá suprimir esta música—NUNCA!
La JAM FOR BOGUI que ha parido Germán será una gran fiesta del jazz. Desfrutémosla! Nos vemos en Clamores!
Un fuerte abrazo con boguiswing,
Dick, el loco de Barquillo
¡No me la pierdo!
Tuve el gusto de cantar un,aunque no largo – ya que venía «hecho polvo» de cantar en otra fiesta- blues (2 estrofas y una improvisación sobre la estructura de 12 compases del blues) sí que lo hice con entusiasmo en esta fiesta del Bogui. Todos esperamos la reapertura del local.
un abrazo
juan josé gonzález
En http://www.tomajazz.com/conciertos/2009/04/jam_for_bogui.htm está la reseña de la Jam. Texto y fotografías de Sergio Cabanillas.