I Ciclo de Jazz Contemporáneo Noruego
- Fecha: 21 de mayo de 2014.
- Lugar: Sala Off de La Latina (Madrid).
- Componentes:
Sara Marielle Gaup: voz.
Arve Henriksen: samplers, trompeta y trompeta de bolsillo.
Terje Isungset: batería y percusiones naturales.
© Sergio Cabanillas, 2014
La primera cuestión que surge al contemplar el espectáculo ofrecido por este trío de músicos noruegos es si se puede encuadrar dentro del campo del jazz o por el contrario, estamos ante otra cosa que va más allá de ser susceptible de ser encasillada. Visto el desarrollo del concierto, más bien hay que inclinarse por lo segundo. Tanto el percusionista Terje Isungset como el trompetista Arve Henriksen, transitan por un territorio bastante ecléctico en el que predomina un planteamiento más conceptual que estilístico. El concepto de música en el que se mueven intenta provocar diferentes estados de ánimo y sugerir más que mostrar, para lo cual se valen de variadas vías sonoras, acaparadas en todos los espacios y tiempos por diferentes artilugios percusivos. Isungset convierte la percusión en un ceremonial en el que utiliza todo tipo de elementos de los que pueda extraer sonidos, ya sean maderas, ramas, piedras, pizarras, tubo de plástico, arpa de boca, campanillas o incluso el hielo como gran protagonista (ausente, pese a las bajas temperaturas de Madrid).
© Sergio Cabanillas, 2014
La gran aliada en este compendio de percusión tradicional fue la cantante Sara Marielle Gaup, con sus joiks, cantos propios del norte de Noruega, donde reside la comunidad Sami a la que pertenece. La tercera pata de la mesa fue Arve Henriksen, considerado el músico más versátil de su generación en Noruega y calificado como “un infatigable investigador de posibles e incluso imposibles experimentos con técnicas y efectos musicales”.
© Sergio Cabanillas, 2014
El interés del concierto radicó en el gran contraste entre las músicas ancestrales, propias de lugares inhóspitos, donde el hombre es más vulnerable a la naturaleza, los cánticos y fuertes discursos percusivos, con las aportaciones eléctricas (trompetas y samplers), que hicieron que estuviéramos mucho más cerca de conceptos como nu-jazz, trance music, ambient y música étnica. Sólo en algunos momentos, muy cortos, pudieron vislumbrarse retazos de libre improvisación.
© Sergio Cabanillas, 2014
Aunque sí consiguieron trasladar hasta la sala, durante cerca de una hora, los sonidos de los helados paisajes de Noruega y su folclore; todo ello mediante su peculiar interpretación de algo tan amplio como el jazz, que ya se ha convertido en un cajón de sastre.
Texto : © Carlos Lara, 2014
Fotografías: © Sergio Cabanillas, 2014.
