Por José Antonio García López y Rafa Mellado.
XXI Festival Internacional de Jazz San Javier
- Fecha: 28 de julio de 2018
- Lugar: Auditorio Parque Almansa (San Javier, Murcia)
- Grupo:
The Chik Corea Akoustic Band
Chik Corea: piano.
John Patitucci: contrabajo.
Dave Weckl: batería.
La última jornada del XXI Festival Internacional de Jazz San Javier prometía ser una fecha especial gracias a la participación de uno de los grupos más esperados por los seguidores del festival: nada más y nada menos que el pianista y compositor estadounidense Chick Corea, liderando un trío formado por él, el contrabajista John Patitucci, y el baterista Dave Weckl, otros dos pesos pesados del panorama jazzístico internacional, que forman parte, desde la década de los ochenta, de los dos principales proyectos de Corea: Elektric Band y Akoustic Band.
Después de algunas palabras de presentación de los tres componentes del grupo dirigidas al público, iniciaron el concierto con “Morning Sprite” (Chick Corea Akoustic Band, 1989) una composición vertiginosa de estilo bebop, en la que Corea caminó a sus anchas sobre el gran piano de cola, fraseando con una técnica rápida y fluida digna de un gran maestro. Patitucci intervino también con una improvisación muy firme y escueta, dejando paso al desarrollo de la parte final de la pieza, en la que Corea y Weckl intercambiaron frases y ritmos a contrapunto en una perfecta interacción. El grupo relajó la dinámica inicial con “A Japanese Waltz”, en el que Patitucci aportó un solo de contrabajo más extenso y elocuente. El contrabajista fue el encargado de presentar la siguiente pieza “That Old Feeling” del compositor Sammy Fain, iniciada con una introducción de Corea en solitario, para compartir después la melodía con Patitucci. Ellos dos fueron los encargados del desarrollo de la partitura, seguidos muy de cerca por la batería de Weckl, impecable en sus definiciones rítmicas. La sesión volvía a tomar aires más sosegados con una versión del standard “In A Sentimental Mood” de Duke Ellington. El respetuoso silencio del aforo se hizo patente ante la magnificencia del pianista y el sugerente solo, de contrabajo con arco, de Patitucci. El carácter latino de “Life Line” (Past, Present & Futures, 2001) elevó la intensidad del momento con sendas incursiones de los tres componentes, sobre todo de Weckl. Corea miró hacia el lado de la música clásica con una corta adaptación de la partitura “Sonata para Piano” de Doménico Scarlatti, para posteriormente regresar al standard “You And The Night And The Music” de Arthur Schwartz, en el que destacó la batería de Weckl con una demostración de su extraordinario virtuosismo. Era el último tema de la sesión y el público reclamó un bis. Corea regresó al escenario para introducir las primeras notas del Concierto de Aranjuez, que fue convirtiendo en “Spain”, el tema más esperado del concierto, en el que invitó al aforo a cantar con él, repitiendo las notas de su piano, hasta acabar en un jubiloso y aclamado final.
El tiempo se refleja en ellos, físicamente, pero no obstante su música sigue sonando tan fresca y elegante como sonaba en los orígenes de la formación. Una formación que, en plena madurez, desarrolla más un concepto musical camino de la abstracción y de la síntesis, con un lenguaje muy expresivo y fluido, delicadamente articulado.
Tres excelentes profesionales del jazz que ofrecieron un concierto espléndido y entrañable, compartiendo sus genialidades y su buen saber hacer con suma entrega. Un gozo musical en todos los sentidos.
Para finalizar la crónica, señalar que la organización otorgó a Chick Corea el premio de la presente edición del festival, en reconocimiento a su carrera profesional y aportación a la historia de la música.
Tomajazz
Texto: © José Antonio García López, 2018
Fotografías: © Rafa Mellado, 2018