Es difícil interpretar un standard de George Gershwin sin que suene a gloria, máxime si se trata de una balada tan intensa y emocionante como «Someone to Watch Over Me». En cualquier caso Donald Byrd lleva al oyente al Paraíso con su interpretación del clásico en su Byrd’ Word. Su solo se funde con la melodía sin establecer límites definidos, y Frank Foster continúa la magia al mismo nivel sobre una sección rítmica paciente y reposada (qué buen trabajo de Hank Jones creando a modo de nube un colchón armónico constante pero discreto). La reverberación del estudio y la separación entre los instrumentos de viento y el micrófono aportan al sonido del quinteto un timbre a la vez cercano y etéreo. Para no caer en lo gratuitamente meloso el metal da paso a la cuerda y la madera. Paul Chambers y Hank Jones improvisan y preparan la despedida. Palabra de Gershwin. Palabra de Byrd.
© Adolphus van Tenzing, 2014
Donald Byrd – Byrd’s Word (Savoy 12032)