En el que fue su primer disco a su nombre, Marc Ribot pela, trocea, destripa y hace menudillos la composición del beatle George Harrison. Las guitarras aceradas (porque aquí Ribot en solitario se multiplica en re-recording) consiguen sacar la esencia del tema original a base de notas disgregadas, saltos de registro y disonancias. En este disco, Ribot aplica el mismo tratamiento a “I Should Care” (de Cahn, Stordhal y Weston), con un enfoque que más tarde volvería a utilizar en su disco Don’t Blame Me y que son un precedente de los dos discos de standards del maestro Derek Bailey.
En Rootless Cosmopolitans (Antilles, 314-510 091-2), grabado en 1990.