Niño Josele: cita en Rio (más o menos). Por Chema García [Escrito de jazz AKA El Rincón de Chema] [Junio de 2025]

Vino Josele a Rio para encontrarse con la Banda Mantiqueira, Caetano Veloso y Marisa Monte y, con él, vino Fernando Trueba, y un guión primorosamente detallado de lo que va a ser serie televisiva, o eso se supone, y lo uno por lo otro, todo ello termina siendo cosa de mucho relumbrón y mucha prosopopeya, según puede verse en las fotos de los artistas en el set de rodaje. De preguntado, yo hubiera recomendado otros brasiles menos transitados y más de botequim, de Audio Rebels y de chorinhos con sabor a asfalto y cachaza. Josele/Trueba sobrevolaron las alturas y dejaron las bajuras para que el cielo lo vea: uno diría que se perdieron muchas cosas pero quién es uno para decirle a nadie lo que tiene que hacer.

Josele es una mezcla de visionario y currante, de flamenco y de un algo que viene de juntar lo irrejuntable y salga el sol por Antequera. A Josele me une la lejanía, 2 viajes a Nueva York, un destripar hercúleo/visionario de la música de Bill Evans, un encuentro en su chalet con vistas, sus corbatas (!ay, sus corbatas!), las risas que nos echamos, porque con Josele hay que admirarse y que reírse, y las 2 cosas vienen juntas.

Nos hablamos, “vamos a tomar una birrras en Santa Teresa”, “toma, claro”. Solo que, a veces, las cosas no salen como esperamos. Resumiendo:

El lunes aguardé a la puerta de su hotel, pero no salió. No estaba en el hotel.

El martes fui al partido en Maracaná según acordado, pero me engañó. No fue.

El miércoles fue al partido pero le engañé. No fui.

El jueves nos engañamos mutuamente. Nadie fue.

El viernes llovió todo el día. No hubo partido.

El sábado le seguí todo el día, solo que resultó que no era él.

Tras una semana de desencuentros, el domingo nos dijimos adiós con el corazón, que con el alma no puedo.

Lúcia con acento en la “u” no entiende como el Niño Josele sigue siendo el «Niño», cuando debería ser el «No-Tan-Niño», o don José. Es brasileña, claro. Yo le recuerdo que Chico Buarque con 80, sigue siendo Chico, pero no la convenzo. El amor es lo que tiene.

Dedicado a Lúcia Araujo, José Manuel Gómez Gufi y al Niño Josele.